Continúa recuperándose
Pau López de su aparatosa lesión en una mano, que le impedirá estar, salvo sorpresa, el próximo 24 de junio (jugará Mirante) ante la
Sampdoria (21:45 horas), en lo que supondrá el retorno oficial a la competición de la A.S.
Roma, que ocupa actualmente el quinto puesto en la
Serie A y tratará de dar caza al
Atalanta, último equipo con plaza
Champions, que tiene tres puntos más que los capitalinos, aunque con un partido menos. El próximo rival europeo del Sevilla -falta por conocer el formato de ese cruce de la
UEL, que podría ser a partido único en sede neutral, o mantener la fórmula de la ida y vuelta- afronta con mucha exigencia la era post coronavirus.
No obstante, el meta gerundense podría estar viviendo
sus últimos días en la Ciudad Eterna. Y es que las informaciones que llegan desde tierras transalpinas colocan al ex del Betis en la rampa de salida tan sólo un año después de fichar por los 'giallorossi', en una operación que supuso
un desembolso cercano a los 30 millones de su entonces
cláusula, porque hubo un pago único de 23,5 millones, el perdón por parte del jugador de ciertas cantidades que le correspondían en concepto de ficha e incentivos, amén de incluirse en la gestión el 50% que poseía la Roma del pase de
Sanabria.
Con todo, el periódico '
Il Sussidiario' cita a Gianluca
Petrachi, director deportivo romano, quien habría confirmado que antes de poder reforzarse en la 20/21 habrá que vender a varios futbolistas. Necesita, según algunas fuentes, ingresar no menos de 50 millones de euros el cuadro adiestrado por Fonseca, señalando en principio a Pau, con mucho cartel en la Premier, donde ya estuvo (militó en el segundo equipo del
Tottenham).
Chelsea, los propios 'Spurs' y el W
est Ham se perfilan como candidatos a contratarle, con un precio de salida de unos
40 kilos.
Incluso, en Italia hablan ya del todavía napolitano David
Ospina como posible relevo de Pau López, confirmándose el gafe que tienen los porteros en la capital transalpina, donde han jugado ya cinco en sólo siete temporadas. Y eso que el ex heliopolitano volvía a defender en un directo de Instagram esta semana su salida del Betis en dirección a la Roma, un viaje que podría frustrarse a las primeras de cambio.
"
No tenía pensado dejar el Betis, porque mi familia estaba bien (en Sevilla). Pero luego vino la Roma y tuve la oportunidad de jugar en un club histórico que siempre va a la Liga de Campeones;
era difícil decir que no. Había
mucho dinero en juego y fue una excelente operación para el Betis también. No podría decir que no a esta experiencia, en un club tan grande e histórico. Los aficionados y compañeros del equipo me trataron muy bien desde el principio", confiesa el catalán.