El
Betis presentó finalmente alegaciones al acta de
González González por la roja directa que vio en el alargue del encuentro ante el
Getafe Loren Morón, apurando un plazo que expiraba a las 14:00 horas de este martes (segundo día hábil posterior a la cita, como recoge el punto 3 del artículo 26 relativo al Trámite de Audiencia). La revisión de las diferentes tomas televisivas deja un resquicio a la interpretación más benévola, por lo que los servicios jurídicos de la entidad verdiblanca, que descartaron el esfuerzo por
William Carvalho al entender que iba a ser imposible revertir la versión del colegiado berciano, intentan evitar no ya la sanción del marbellí, un giro harto complicado, sino que su ausencia se prolongue entre dos y cuatro compromisos.
Y es que la redacción del acta resulta muy perniciosa para el ‘16’ bético, pues el árbitro lo acusa de “ser culpable de conducta violenta, al golpear con el brazo en la cabeza a un adversario, estando el balón en juego”. Una agresión, en otras palabras, aspecto que queda desvirtuado al comprobar que Loren, simplemente, se gira con la extremidad superior izquierda extendida e intenta quitarse de encima la marca de
Damián Suárez, por lo que no hay intención de hacer daño.
Hoy, como de costumbre, el Comité de Competición, presidido por la jueza única de la RFEF Carmen Pérez, fallará al respecto, decisión tras la que, si fuera necesario (como ocurre con el caso de Carvalho, aunque no se haya alegado), se podría presentar un recurso ante Apelación, segundo peldaño de la justicia deportiva en España, un organismo también renovado el pasado verano y que está presidido por Miguel Díaz y García-Conlledo.