Boudebouz recibió este miércoles el permiso del Betis para abandonar la concentración en Querétaro y viajar hasta España, donde tomará un vuelo a su vez que le lleve hasta
Saint-Étienne, donde está previsto que este viernes pase las pruebas médicas.
El vuelo transoceánico impedirá que
a lo largo del día de hoy puede haber algún tipo de novedad en este asunto. No será, como muy pronto, hasta mañana cuando se pueda cerrar el traspaso del jugador al conjunto galo.
El centrocampista argelino
firmará por tres temporadas. El Saint-Étienne le va a respetar el sueldo (1,9 netos) que iba a cobrar las dos temporadas que le quedaban de contrato en el Betis, es decir unos 3,8 en total, pero prorrateados en tres ejercicios, por lo que
pasará a cobrar 1,3 millones por año.
El Betis, por su parte, amortiza parte de la inversión que hizo en agosto de 2017, cuando
lo fichó al Montpellier por 8 millones por el 80 por ciento de su pase.
De este modo, el conjunto verdiblanco
ingresará cuatro millones fijos, más una pequeña cantidad en variables, aunque se reserva un porcentaje de una futura venta, algo improbable habida cuenta de que Ryad cuenta ya con 29 años.
Con la de Boudebouz
ya son siete las salidas que ha cerrado el Betis en lo que va de verano, tras las de Pau López, Sergio León, Inui, Brasanac, Alin Tosca y Álex Alegría.