Son tan superiores que pueden ganar de cualquier manera, y es que los Boston Celtics han logrado vencer en el tercer partido de su serie ante los Indiana Pacers tras remontar, y ahora están a un paso de la gran final de la NBA. Tras dos duelos en el TD Garden muy diferentes, uno que los de Rick Carlisle tenían ganado y acabó en manos de los Mazulla por un accidente, y otro en el que los locales fueron tremendamente superiores, en el primero en Indianapolis nada de eso ha importando y los Celtics remontaron 18 puntos de desventaja para triunfar por 114-111.
Sin la estrella de los Pacers, Tyrese Haliburton, de baja por una lesión muscular, con este triunfo toman ventaja por 3-0 en la serie y se colocan a un solo triunfo de sus segundas Finales de la NBA en tres años. Con 36 puntos, diez rebotes y ocho asistencias de Jayson Tatum y 23 puntos de Al Horford, protagonista además con tres tapones, los Celtics dejaron muy tocados a unos Pacers que se quedaron cortos una vez más, pese a disputar un partido de extraordinario compromiso. Pero los Celtics son el mejor equipo de la temporada regular con un balance de 64 victorias y 18 derrotas, y lo han demostrado, encontrando el camino del triunfo pese a una noche de altibajos, encomendándose a su defensa en los momentos calientes y con Jrue Holiday un hombre clave para mantenerles con vida.
Los de Boston han ganado los cinco partidos disputados fuera de casa en esta postemporada y tendrán la primera bola de partido este lunes, de nuevo en el Gainbridge Fieldhouse de Indianápolis, para regresar a las Finales NBA. Tatum dio un paso al frente, leyendo los momentos clave del partido, repartiendo el juego y dando ritmo a sus compañeros, como un Horford que vivió la mejor noche anotadora de su carrera desde el arco con 7 de 12 en triples. Y en defensa, para tal y como señaló su entrenador, ser "el ancla" con unos espectaculares tapones a Obi Toppin y un triple contundente que acercó a los Celtics a dos puntos con un minuto por jugar.
Jaylen Brown contribuyó con 24 puntos y Holiday acabó su partido con catorce puntos, nueve asistencias y tres robos, el último de ellos clave cuando los Pacers tenían la última potencial posesión, abajo 111-112. Holiday llegó a este partido sin estar al máximo de la forma y no participó en el entrenamiento previo al encuentro, pero forzó y acabó siendo protagonista en una noche en la que los Pacers tiraron con un 63 % de acierto en la primera mitad y tuvieron 18 puntos de ventaja en el tercer período.
Los Pacers perdieron por primera vez en casa en esta postemporada, tras un perfecto seis de seis. No pudieron contar con Haliburton, quien se retiró lesionado en el muslo izquierdo en el segundo partido de la serie. Ahora tienen todo a favor los de Mazzulla, ya que los equipos que tuvieron este tipo de ventaja en una serie de 'playoffs' siempre acabaron avanzando en los 154 precedentes anteriores. De hecho, los Celtics estuvieron a un paso de romper esta estadística el año pasado, cuando remontaron de 0-3 a 3-3 en las finales del Este contra los Miami Heat, antes de perder el séptimo partido en casa. Pero esta vez no parece que vaya a pasar, vista la superioridad que gastan.