Las finales de Conferencia de la NBA ya están en marcha, si ayer en la del Este, los Celtics dieron el primer golpe ganando de milagro a Indiana en casa, en el Oeste si que se ha llevado el gato al agua el equipo visitante. Los Dallas Mavericks acabaron la serie contra Oklahoma tocados, con sus estrellas en un momento físico mejorable y muy cansados, pero no les ha pesado en el primer duelo de la serie, ya que con una actuación estelar de Luka Doncic y Kirie Irving han logrado dar el primer golpe y robar el factor cancha a los Minnesota Timberwolves.
El esloveno con 33 puntos, e Irving, con 30, lideraron la victoria por 105-108 de los Mavs. Por quinta vez en esta postemporada los Mavericks ganaron a domicilio, pero lo del Target Center tiene un peso enorme considerando que a los texanos se les atragantó por completo el triple, con un seis de 25 que, comparado con los 18 conectados por los Wolves, pudo pasarles factura. Pero Doncic anotó quince de sus 33 puntos en el cuarto período y contó con el apoyo de un Kyrie Irving, protagonista en la primera mitad en la que estuvo incontenible para la defensa de los Wolves y sostuvo a los suyos con 24 tantos.
En una noche poco brillante de PJ Washington (13 puntos y 2 de 8 en triples), Daniel Gafford aportó 10 puntos y nueve asistencias y Dereck Lively firmó nueve puntos y once rebotes saliendo del banquillo texano, para sostener la zona ante el físico equipo de Minny. Los Wolves, que regresaban a unas finales de conferencia por primera vez desde 2004, estuvieron arriba en la mayoría del partido, pero les faltó continuidad y experiencia en la gestión de los momentos clave. Jaden McDaniels fue el líder anotador con 24 puntos y seis triples, cinco de ellos anotados en una espectacular primera mitad, mientras que Anthony Edwards no tuvo su mejor noche y firmó 19 puntos, once rebotes y ocho asistencias, con 6 de 16 en tiros de campo y cinco triples. Towns metió 16 puntos y capturó seis rebotes.
, que había promediado seis puntos en las primeras mitades de estos 'playoffs', llegó al descanso con 24 y recortó desde la línea de personal la desventaja a tres unidades, después de que los Wolves estuvieran en el +9. Ese -3 era una victoria para los Mavericks considerada la actuación espectacular de los Wolves. Los apuros de los Mavericks desde el arco siguieron en la segunda mitad, pero los porcentajes de los Wolves bajaron y, con Doncic levantando la voz, los texanos forjaron su remontada. El 77 pisó el acelerador y firmó él solo un parcial de 7-0 que dio ventaja 89-91 a los suyos y ese parcial se extendió hasta el 13-0 para dar a los texanos una ventaja de ocho. Respondió con carácter Minnesota y se colocó cuatro puntos arriba con tres minutos para el final, pero Doncic, con trece puntos en el cuarto período, castigó a los de casa. Fue un golpe en la mesa de los de Jason Kidd, que pase lo que pase el sábado, van a tener la opción de llevarse la serie en casa.