Marta Sánchez4 min lecturaEl Open de Australia es una competición durísima, en la que el agotamiento físico le está pasando factura a muchos de los tenistas. Entre ellos Jannik Sinner, que ha sufrido más de lo esperado en su duelo de octavos. El número uno del mundo ha sido capaz de reponerse de sus problemas físicos y derrotar a Holger Rune, que estaba haciendo un torneo muy destacado consolidándose como uno de los jóvenes más prometedores.
Pero el positivo de Sinner y su caso por dopaje le va a pasar factura en el tenis, ya que ahora Rune vuelve a poner sobre la mesa esta polémica e insinúa un nuevo caso, para así explicar su derrota ante el italiano. Estas quejas vienen ya que Sinner tuvo que parar el partido para que sus fisios y los médicos del torneo le atendieran, y al regresar Rune ya no tuvo opciones. Un momento que el danés pone en duda, acogiéndose al juicio por dopaje que Jannik aún tiene pendiente.
El tenista italiano ha hecho saltar las alarmas con sus problemas físicos en su choque de octavos, sufriendo temblores y teniendo que ponerse en manos de sus fisios para poder continuar el partido, después de que otros tenistas se hayan tenido que retirar al no aguantar el ritmo de sus enfrentamientos, como Jack Draper o Gael Monfils.
Sin embargo, después de ser atendido pudo regresar a la pista y sentenciar el encuentro, logrando el pase a cuartos para seguir luchando por el primer Grand Slam del año. Un momento que Rune critica y por el que vuelve a sacar a la luz el caso de dopaje del italiano. "Está bien que le haya mirado el médico si tenía problemas, pero creo que el tiempo médico duró demasiado. Me pareció brutal estar parados durante más de 10 minutos en medio del set" comenzó a explicar Rune, que reconoce que este parón le ha pasado factura en el partido y le ha dejado sin opciones.
Pero después insinuó un nuevo dopaje de Sinner, que le ayudase a recomponerse. "El juez de silla me dijo que se lo tenían que llevar fuera para más revisiones. No sé qué le harían, porque al volver a pista lo hizo completamente encendido" aseguró el danés, lanzando un dardo y aprovechando la investigación por dopaje, del que ya le declararon inocente al considerar que fue un positivo involuntario.
Antes de comenzar el torneo y tras conocer la fecha del último juicio pendiente, Sinner dejó claro que ya fue investigado y declarado inocente, por lo que no le pueden seguir culpando. Mientras que del episodio que ha vivido en esta jornada no ha querido dar detalles.
"Hoy ha sido extraño. No me sentí bien. Llegué al partido lo más tarde que pude. Antes de jugar, hablé con el médico y conforme pasó el tiempo fui sintiéndome mejor. Son condiciones muy duras. Hoy jugué contra Rune y contra mí mismo" han sido las únicas palabras del italiano, que ya está en cuartos y dispuesto a pelear por reconquistar el título.