La temporada de tenis 2025 ya está a la vuelta de la esquina, pues no son pocos los que la iniciarán en los últimos días de este mes, mientras que los más tardíos se van a esperar hasta el Open de Australia en la primera mitad de enero. Sin embargo, tras unas semanas de descanso ya están en marcha las pretemporadas de muchos de los grandes 'capos' de la ATP, que empiezan a afilarse de cara al durísimo año que se les viene por delante y donde van a volver a abrir viejas rencillas sobre la pista.
Y si hablamos de grandes es imposible no mencionar a Carlos Alcaraz. El murciano ha estado unas semanas de vacaciones en el Caribe y Estados Unidos, donde ha jugado algunas exhibiciones, pero ya es momento de ponerse a currar. De hecho, esta semana inicia su pretemporada en Villena, en la Ferrero Tennis Academy. Allí, además de a su nuevo segundo entrenador, Samuel López, Carlitos iba a contar también con la ayuda de dos grandes jugadores del circuito, entre los 32 primeros del ranking, y que le iban a permitir poder probarse ante fuego real, como son Flavio Cobolli y Jack Draper. Pero finalmente, el británico no podrá estar por lesión.
Draper, actual número 15 del ranking ATP estaba llamado a ser una de las estrellas de esta pretemporada y una gran ayuda, pues iba a subir mucho el nivel de los entrenos de un Alcaraz al que ya sabe lo que es ganar. Lo hizo eso sí, en hierba, su superficie favorita, en concreto en octavos del torneo de Queen's. Sin embargo, el anglosajón ha sufrido un percance en su última sesión antes de viajar a Villena y no podrá participar en esta semana del máximo nivel tenístico.
No obstante, entrenando con Alcaraz si que estará uno de los mayores proyectos que tiene el deporte de la raqueta a nivel global y en Italia en particular, Flavio Cobolli. El florentino, de 22 años y en el puesto 32 de la ATP ya estuvo el año pasado en estas mismas fechas entrenando con Carlos y Ferrero en la academia alicantina, y quedó tan satisfecho que ha decidido regresar.
No es una decisión que extrañe en exceso, ya que ha sido su año de confirmación, ascendiendo hasta llegar a ser cabeza de serie en los 'grandes' y conseguir grandes victorias, incluso fue suplente en la Laver Cup. Pero para buscar subir el escalón que le falta ha elegido repetir lo que le funcionó a las mil maravillas.