Novak Djokovic había generado dudas en su debut ante Vukic y, en su segundo partido, las ha confirmado. El número uno del mundo se despedía de Indian Wells 2024 en su segundo partido tras caer ante el tenista número 123 del ránking de la ATP. El joven italiano Luca Nardi daba la mayor sorpresa del año con la eliminación del gran favorito, un Djokovic que, a lo largo de su carrera, ha tenido pocas 'equivocaciones' como ésta, algo que en algún momento sí han tenido alguno de sus máximos rivales.
Nardi, que había entrado en el cuadro final como 'lucky loser' tras perder su último partido de la fase previa y ser repescado, jugó el partido de su vida para ganar por 6-4, 3-6 y 6-3 a un Djokovic que no estuvo a su nivel habitual, algo que también se pudo ver durante muchas fases en su debut ante el australiano Vukic. En especial, en el segundo set que perdió.
"Le felicito por ese tercer set, en el que ha jugado un gran tenis. No sabía mucho de él, pero le había visto jugar. Tiene una gran calidad desde la línea de fondo, sobre todo con la derecha y se mueve bien. Entró como lucky loser, así que no tenía nada que perder, y se ha merecido la victoria. Estoy más sorprendido con mi nivel, que fue muy malo. Las dos cosas se han juntado. Él ha tenido un gran día y yo uno muy malo", analizaba Djokovic al final del encuentro, al tiempo que no aseguraba que fuera a seguir su gira y ponía en suspenso su participación en el Miami Open.
Nardi, como señala el serbio, jugó sin la presión de saberse ante un rival de este calibre. Ya había cumplido de sobra tras ganar a Zhang y este partido era para disfrutar. No sintió la presión y eso le permitió arriesgar. Y todo le salió. Djokovic se vio sorprendido, en especial cuando el italiano restaba, ya que no suele encontrar esa resistencia en sus rivales, pero Luca Nardi estuvo muy efectivo y eso puso nervioso al serbio, que acabó cediendo su servicio, perdiendo peloteos largos y, al final, el set.
Novak Djokovic reaccionó en una segunda manga en la que se le vio más regular y se encontró con el peor Nardi del partido. El italiano, no obstante, demostró que estando mal también podía plantar cara y recuperó el 'break' inicial del serbio antes de volver a ceder el suyo. Esa confianza de ver que, jugando mal, podía hacer daño a Djokovic tal vez le hizo tranquilizarse en el set definitivo, en el que fue claramente mejor. Nardi volvió a la versión del principio, a jugar desinhibido y sumar golpes ganadores ante los que un mal Djokovic no pudo hacer frente. El serbio no fue capaz de cambiar su dinámica y así, era cuestión de tiempo que perdiera ese partido.
"Le ayudé a jugar bien. He cometido errores terribles, he sido muy defensivo y no fui a buscar la pelota en el tercer set. Él dio un paso al frente y aprovechó mejor su momento. Jugó liberado y más agresivo que yo. Fue a por los puntos. Hoy también hizo más viento que en mis entrenamientos, pero eso no es excusa. Yo debería haberlo hecho mejor. Así que todo el crédito para él", sentenciaba Novak Djokovic, que, como número uno, nunca había sufrido un batacazo de este calibre a lo largo de su carrera.