Nadie duda de que
Monchi tiene en su agenda varios nombres de centrales subrayados en rojo por si se acaba marchando Koundé. Aunque la pandemia ha provocado que el presente
mercado de fichajes sea el menos movido que se recuerda en años, era de esperar a que las oficinas del Pizjuán llegase alguna gran oferta por alguna de sus pilares, y dos de ellos se encuentran en el eje de la zaga:
Diego Carlos y Koundé, siendo finalmente el francés quien se ha convertido en
objeto de deseo para un Manchester City que también fue vinculado con el brasileño.
De momento,
Koundé estará este jueves en la Supercopa de Europa ante el Bayern. Pero tras esa cita, quedarán once días para el cierre del mercado y en Inglaterra
ya anuncian que el City volverá a la carga, tras ser rechazada por el Sevilla FC su
primera oferta, de 55 millones de euros. Ahora, el conjunto de Guardiola podría llegar a los
70 kilos más el pase de Otamendi. Y a esa posible propuesta, Monchi quizás ya no pueda decir ‘no’, pues él mismo se encargó de recordar esta semana que
el modelo de negocio del club ha dado muchos éxitos y no se debe cambiar. Es decir, que se seguirá vendiendo para crecer, pues además ese dinero permitiría rematar una planificación a la que aún le quedan varios retoques,
solicitando el propio Lopetegui más fichajes para engordar el “fondo de armario”.Por todo ello, Monchi tiene sobre la mesa
diferentes alternativas que podría activar si finalmente se consuma el traspaso de Koundé. Ya desde finales de la pasada campaña han sido varios los centrales que han aparecido en la órbita blanquirroja, algunos de ellos reconociendo por sí mismos que han sido seguidos por el director deportivo del Sevilla FC. Pero al mismo tiempo, el mercado afronta su recta final y
algunas de las opciones que gustaban ya se han esfumado. Es el caso del albanés Marash
Kumbulla, contratado por la Roma, que pagará 3 kilos por su cesión al Hellas Verona y 22 más para comprarlo a final de temporada; o del francés
Alxel Disasi, que cerró su fichaje por el Mónaco, procedente del Reims, a cambio de 13 millones.
Ambos comparten lo que parece ser un
denominador común en casi todos los centrales vinculados: su juventud. El primero sólo tiene 20 años y el segundo, 22. Más joven aún es
Wesley Fofana, otro que está muy cerca de esfumarse, y que Monchi tendría controlado dado su perfecto conocimiento del mercado francés. Pero aún son varios los que están sobre la mesa. Y a buen seguro, algún tapado. Llegado el momento, habría que actuar con rapidez y el de San Fernando suele estar prevenido.
Lucumí, Senesi, Simakan, Rüdiger o Todibo son algunos de los nombres que han sido relacionados, repasando ED . En cualquier caso, la llegada de otro central, independientemente de si Koundé se marcha o no, se antoja necesaria, pues
Lopetegui sólo tiene a tres a sus órdenes y no parce que
Gnagnon esté en condiciones de ser el cuarto.