Después de un mes intentando volver a
Brasil tras salir del Amiens en diciembre y del Sevilla el pasado mes de agosto,
Paulo Henrique Ganso jugará finalmente en el
Fluminense, el club que ha apostado por él con más fuerza en estas últimas semanas.
El
Sevilla ha hecho oficial la marcha del centrocampista brasileño, que llegó a Nervión en verano de 2016 a cambio de nueve millones y medio de euros del Sao Paulo, ha rescindido su contrato la entidad de Eduardo Dato y llega con la carta de libertad al
Fluminense.
Pese a las esperanzas depositadas en
Ganso, el centrocampista nunca llegó a hacerse con un puesto indiscutible en el once de
Jorge Sampaoli en su primera temporada, como tampoco lo logró con
Berizzo,
Montella ni
Caparrós en la segunda, aunque sí dejó detalles de su calidad en varios partidos.
Así, el brasileño acabó saliendo el pasado verano a préstamo al Amiens francés, pues
Pablo Machín tampoco contaba con el centrocampista. En Francia,
Ganso no llegó a adaptarse y pese a comenzar teniendo minutos, fue desapareciendo del equipo hasta el punto de pedir a ambos clubes que anularan su cesión para poder volver a Brasil.
De esta forma, el
Ganso pone fin a su vinculación con el
Sevilla, donde apenas ha disputado 28 partidos en dos temporadas, en las que hizo siete goles y firmó seis asistencias en 1.613 minutos de juego.