Vincenzo Montella se ha reincorporado a la rutina del equipo y ha dirigido el entrenamiento del equipo este martes mientras el consejo de administración del Sevilla FC se reunía en el Sánchez-Pizjuán para decidir el rumbo a tomar por el club.
El italiano decidió tomarse unas jornadas de descanso tras la final de Copa del Rey a pesar de la humillación sufrida por los suyos, algo que ha sido criticado por la afición. Unos días libres que aprovechó para viajar a Milán y relajarse junto a su pareja, Rachele Di Fiore.
Durante ese viaje, al entrenador sevillista se le ha visto pasear por las calles de la ciudad milanesa bastante tranquilo y despreocupado a pesar de la dura situación que atraviesa su equipo, especialmente tras la goleada por 0-5 recibida por el FC Barcelona en la final de la Copa.