Después de la masacre que fue la etapa 11 del Tour de Francia, en la primera jornada en la que se vio sufrir a Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard demostró que como poco tiene piernas para estar con el esloveno, de cara a lo que se viene en los Pirineos este finde semana, este jueves volvía a ser un día propicio para los sprinters, una jornada llana, que a diferencia de lo que venían siendo las últimas, si que tuvo emoción, aunque el ganador fue quien se confirma como gran velocista de esta edición, el eritreo Biriam Girmay. Respecto a la general hay algo que destacar, y es que tristemente Primoz Roglic se fue al suelo a 12 de meta y perdió mucho tiempo respecto al resto de hombres fuertes.
El eritreo logró este jueves en Villeneuve-sur-Lot su tercer triunfo al esprint en este Tour, por delante del belga Woud van Aert y del francés Arnaud Demare. En una etapa totalmente llana, que tuvo una escapada controlada y que se cerró, como estaba previsto, al esprint; Alpecin y Movistar desplegaron más energías que nadie en cabeza de pelotón para controlar la etapa hacia Villeneuve-sur-Lot, y el esfuerzo tuvo sus efectos a 35 km de meta, cuando el pelotón empezó a rodar de nuevo compacto bajo un sol de justicia.
Pero hubo caída a 12 kilómetros de meta, provocada por una isleta que desequilibró al kazajo Alexey Lutsenko, y marcó el final, además atrapó a Primoz Roglic, que parece gafado desde que perdió el Tour el último día ante Pogacar hace cuatro años. El triple ganador de la Vuelta no se reintegró al grupo y perdió tiempo, además de llegar con la rodilla ensangrentada. También quedó atrapado Van der Poel, por lo que Philipsen se queda sin su lanzador de lujo.
Podía ser el día de Van Aert, con licencia para buscarse la vida al esprint. El belga atacó de lejos, lo mismo que el francés Demare, pero apareció desde atrás, remontando, Girmay para dejar claro quién es el rey del esprint en el Tour. Ya lleva tres el eritreo, agrandando la historia que él mismo inició ganando la primera clásica en la Gante Wevelgen para el África negra. Luego se presentó en sociedad en el Giro y en el Tour ha monopolizado el esprint. Vestido de verde, sueña con llegar con ese maillot a Niza.
Pogacar mantuvo el maillot amarillo en una clasificación general en la que su compatriota Promoz Roglic perdió 2:27 tras el golpe. El esloveno, segundo del Tour de 2020, perdió dos puestos en la general, en beneficio del portugués Joao Almeida y del español Carlos Rodríguez, y ahora es sexto a 4:42 del líder. Pogacar mantiene 1:06 con Remco Evenepoel y 1:14 con Jonas Vingegaard, mientras que Almeida es cuarto a 4:20 y Rodríguez quinto a 4:40. Hoy no hubo segunda oportunidad para el esloveno, que ya se cayó este miércoles en el descenso del col de Pertus, pero los jueces de carrera decidieron darle el mismo tiempo que a Evenepoel en meta, que era el ciclista con el que se encontraba en el momento del accidente.