Sevilla, 25 sep (EFE).- El entrenador del Sevilla, Julen Lopetegui, se ha felicitado este sábado por el "buen partido, que estaba controlado hasta la expulsión", que ganó su equipo (2-0) al Espanyol gracias un "trabajo solidario y con mucha alma con uno menos".
A raíz de la expulsión del danés Thomas Delaney, Lopetegui ha admitido que el conjunto barcelonés "ha controlado pero no ha creado ocasiones", aunque se ha quejado de la decisión arbitral porque su jugador "sabe que no tiene que hacer eso, pero es desproporcionado" el haberle sacado dos amarillas en la misma jugada.
El técnico vasco alabó a sus futbolistas porque hicieron "el trabajo que había que hacer" para hacerse con los tres puntos al cabo de "un partido muy completo a lo largo de los 90 minutos" y elogió a la afición, que "ha tenido mucha culpa de que el equipo haya aguantado la última media hora".
"En los momentos malos es cuando más los necesitamos", afirmó Lopetegui, quien lamentaba la lesión muscular del delantero marroquó Youssef En-Nesyri, que "puede ser preocupante".