Fernando Alonso es uno de los mejores pilotos de la historia, eso es una verdad innegable, pues lleva más de dos décadas en el máximo nivel del automovilismo y aún le queda mucho, pero en esta segunda etapa en la Fórmula 1 está llegando un paso más allá, con actuaciones memorables a la que solo le falta un monoplaza que acompañe. Este pasado fin de semana en Singapur fue el epítome de esta tendencia, al clavar absolutamente todas las sesiones para acabar en un octavo puesto que puede sonar a poco, pero que es uno de los resultados más llamativos, puesto que el suyo es de los peores coches de la parrilla.
El sábado logró colarse en la Q3 gracias a un manejo increíble de los muros, besándolos en cada curva y poniendo al límite su Aston Martin, algo solo al alcance de él y quizá de Max Verstappen, quien también apuró al máximo para colarse en primera línea. Los dos demostraron contra el crono que están a un nivel superior, pero es que en la carrera, Fernando, de 43 años, dio una vez más una 'masterclass' de como gestionar vuelta a vuelta, aún siendo más lento.
Si algo tiene Singapur es que es duro, muy duro, sobre todo por el asfixiante calor, que hizo que los pilotos salieran tras los 62 giros absolutamente destrozados del monoplaza. Sin embargo, el ovetense está muy fresco, algo reseñable por su veteranía. Más aún tras lo que explicó en los micrófonos. Y es que en plena entrevista le dio un calambre en el dedo del pie y ahí, tras reponerse, desveló algo que dejó patidifuso a todo el mundo, y es que no bebe agua. Normalmente en las carreras no usa el sistema de avituallamiento porque no puede conducir con el "pitorro" en la boca.
No deja de parecer extraño, debido a que en días como así, con tanto calor, deshidratarse puede ser un factor decisivo, ya que tomar decisiones a tanta velocidad sin estar al 100% de capacidades, puede ser fatal. Aunque eso sí, no es el primer piloto que habla de que el sistema es algo molesto para la conducción o de que el agua se calienta en muy pocas vueltas y hace que sea difícil hidratarse. Sin embargo, lo hacen por necesidad, pues ya se vio a Colapinto o Norris salir tocados. Pero por eso mismo sorprende tanto ver a Alonso así, lo que es una muestra del entrenamiento que sigue y de que pese su edad, ha llegado como un absoluto toro a esta parte de su carrera.