Hasta que Carlos Sainz no certifique el equipo en el que va a correr la próxima temporada, su nombre va a estar en el ojo del huracán. Y luego, posiblemente también, aunque por otros motivos.
En su último Gran Premio de España de F1 con Ferrari sólo pudo ser sexto, dejó pasar a su compañero Charles Leclerc para que éste pudiera luchar con Russell y, pese a ello, hubo un cruce de declaraciones posterior que le hizo indignarse.
Todo viene de la pelea que, en la primera parte de la carrera disputada en Montmeló, llevaron a cabo Sainz y Leclerc. El español adelantó al monegasco, quien no quiso dar su brazo a torcer y trato de evitarlo pese a que tenía la posición perdida. Ambos coches se tocaron y ese tiempo que perdió Leclerc acabaría pasándole factura en su lucha por acabar cuarto en la carrera.
"No entendí el sentido de hacer eso cuando se dijo claramente antes de la carrera que teníamos que ahorrar en esta parte de la prueba. Es un poco innecesario, pero también entiendo que es su carrera de casa y es un momento importante de su trayectoria, así que supongo que quería hacer algo un poco espectacular, pero quizá yo no era la persona adecuada para hacerlo", se quejó, una vez más, Leclerc, que ya lo había hecho durante la carrera.
A diferencia de otras veces, esta vez encontró respuesta en Carlos Sainz, que ya está cansado de oír las quejas de Charles Leclerc cada vez que hay una lucha entre ellos o cada vez que acaba por delante el madrileño. "No entiendo sus quejas. Creo que son demasiadas veces las que se queja después de la carrera. Entiendo que en caliente pueda pensar eso, pero... no lo sé", se mordió la lengua Sainz ante la acusación del monegasco de que ese adelantamiento le había hecho perder puntos a Ferrari.
Si en algo tenía razón Leclerc era que Carlos Sainz está tratando de dar lo mejor de sí mismo en un momento importante para él. Cuando parece que la elección de equipo es inminente, con Wiliams como gran favorito y Audi-Sauber como alternativa, la charla desvelada ayer por El Confidencial entre Briatore y Sainz padre abría una inesperada vía que no se planteaba.
Lo que en un principio un rumor de paddock, no en vano Carlos Sainz conoce a Flavio Briatore, el último 'fichaje' de Alpine, desde hace muchos años, ha ido tomando forma en las últimas horas y la opción de Alpine ya está sobre la mesa. Y no sólo porque la escudería de Enstone sea una de las que más ha mejorado con la llegada de la F1 a Europa y en el último GP volvió a meter a sus dos pilotos en los puntos. También porque la oferta que podría hacerle a Sainz sería para el próximo año, lo que le abriría la puerta a elegir destino para 2026 sabiendo lo que tiene cada equipo de cara al cambio de reglamentación.
Ahora mismo, Williams es el peor equipo de la parrilla y Sauber pelea con RB por la 'penúltima' posición, malos augurios para un piloto que quiere seguir peleando por los puntos el próximo año. Alpine no tiene ahora mismo ningún piloto para la próxima temporada. Tiene claro que no va a contar con Ocon y negocia con Gasly, por lo que Sainz tendría hueco para regresar a un lugar que conoce del pasado.