Antonio José Medina4 min lecturaFernando Alonso vivió un Gran Premio de Miami de F1 agridulce. Agrio porque en ningún momento del fin de semana se vio para competir con los mejores, ni siquiera en una clasificación donde siempre rendía. Y dulce porque se vio beneficiado por la salida del 'safety car', que le permitió ganar unos segundos vitales y optar a unos puntos que finalmente logró tras acabar noveno en la línea de meta.
El piloto asturiano admitió errores propios, pero también mandó un aviso a Aston Martin para que mejorase en la próxima carrera, que tendrá lugar en Ímola, para al menos poder pelear de nuevo con Mercedes, la escudería con la que ha podido competir Alonso en este inicio de temporada 2024.
Tras cinco grandes premios en los que el piloto español sufrió los domingos pero ilusionó los sábados, lo del Autódromo Internacional de Miami fue un paso atrás. No estuvo delante ni un día ni otro y los equipos con los que le tocó pelear fueron Alpine, Haas y RB.
Un fin de semana sufrido según explica en AS el jefe de Aston Martin, Mike Krack. “El viernes fue bien, séptimo y octavo en clasificación con pocos márgenes, como en las carreras anteriores. En el sprint terminamos en la primera vuelta -se tocó con Stroll-. La clasificación fue complicada, los neumáticos se sobrecalentaban, probamos todo y no llegamos a conseguirlo con la goma blanda. Tuvimos problemas y esta vez estábamos en el lado malo de esa décima y media que tienes por arriba o por abajo. Fernando tuvo problemas en el primer sector”, afirmó.
Y que tenía una explicación. Aston Martin tomó una decisión con respecto a los neumáticos que acabó lastrando a sus hombres y, especialmente, a Fernando Alonso. "Fue más una decisión que se tomó basada en el comportamiento de los neumáticos. Si tienes mucho deslizamiento, sopesas la carga aerodinámica contra la velocidad punta, y esa es una discusión permanente en la oficina. Los pilotos tienen sus opiniones porque tienen que tratar de adelantar, e hicimos esa elección. Si empezáramos de nuevo, tal vez la elección sería diferente, pero creo que la selección del alerón al final no fue el factor decisivo", admite Mike Krack, quien señala los problemas que tenía Alonso para adelantar, incluso, a los Alpine.
"Era realmente complicado pasar y lo fue donde están los puntos de detección del DRS, debes estar muy cerca y luego usar toda tu energía para adelantar (...) Teníamos uno de los monoplazas, el Alpine, que es el más difícil en la recta junto con el Williams. Fernando ya lo dijo antes de la clasificación, después de la carrera al sprint, porque creo que condujo toda la sprint detrás del Alpine", advierte Krack.
Ahora, en Ímola, en el GP de Emilia Romaña esperan dar un paso adelante, como ha 'pedido' Fernando Alonso. “No tenemos el mismo coche en ninguna carrera. En Ímola empieza la temporada y todos mejorarán sus coches porque se gana tiempo con la logística. Será una buena oportunidad y haremos cambios”, advierte. De cómo sumen en cada monoplaza decidirá el nuevo orden.