El miércoles trajo uno de los momentos más tristes de los últimos años en el olimpismo español en general y el tenis en particular, cuando Rafa Nadal y Carlos Alcaraz cayeron eliminados en los cuartos de final de París 2024 ante la pareja estadounidense formada por Austin Krajicek y Rajeev Ram, en el que fue el último momento de la leyenda de Manacor en unos Juegos Olímpicos, y seguramente también en las pistas de Roland Garros. No obstante, el murciano se ha redimido y ya está en las semifinales individuales. Pero en dobles también quedaba una pareja por jugar, en este caso en el cuadro femenino, Sara Sorribes y Cristina Bucsa, y ellas han cumplido y ahora están a una victoria de la medalla.
Sorribes y Bucsa rompieron con los pronósticos para convertirse en una opción a metal, al situarse en la penúltima ronda tras batir, en un duelo épico, a las gemelas ucranianas Lyudmyla y Nadila Kichenovk por 6-3, 2-6 y 12-10. Y hubo incluso drama, el que llegó en el supertiebreak, porque después de perder el segundo set lo tuvieron muy cuesta arriba. Lyudmila y Nadila, se colocaron con un 7-3 que les acercaba al triunfo final. Pero si algo tiene el duo español es el espíritu de lucha. Se aferran a la pista. Lo hacen habitualmente en sus compromisos individuales y también en dobles.
Más en los Juegos, donde enmendaron con garra la situación y se pusieron por delante después de ejecutar un parcial de 6-0 que les situó con dos puntos de partido. Y de nuevo resucitaron las ucranianas, que empataron. Y hay hubo 'match point' de España que salvaron las Kichenkov, pero al cuarto, sentenciaron. Un triunfo después de una hora y 43 minutos que les lleva a las semifinales, que jugarán ante las rusas Mirra Andreeva y Diana Schnaider, que ganaron a las checas Barbora Krejcikova y Kateryna Siniakova, primeras favoritas, por 6-1 y 7-5.
Es un nuevo éxito de la castellonense y la cántabra que han superado la temprana eliminación de ambas en individuales. No compiten habitualmente como pareja, de hecho solo lo han hecho una vez, y con victoria, en el WTA 1000 de Madrid. Acumulan juntas solo siete partidos como pareja y hasta ahora no conocen la derrota. Bucsa, de 26 años, OCUPA 20 en dobles, Y cuenta con cuatro éxitos en la modalidad, mientras Sorribes, por su parte ocupa el puesto 27, pero está más asentada con Marie Bouzkova como pareja, con la que ha conseguido los trofeos de Pekín el pasado año y Estambul en 2022.