BÁDMINTON

Carolina Marín reconoce su lastre en París

Carolina Marín consiguió contra todo pronóstico llegar a París con opciones, y ahora es una de las favoritas para conseguir medalla, pero tiene en su contra que su deporte ha cambiado mucho, sus rivales ahora son más jóvenes que ella, y va a necesitar un plus físico

Carolina Marín reconoce su lastre en París
Carolina Marín en París 2024, días antes de su debut - @CarolinaMarin
Francisco SalasFrancisco Salas 4 min lectura

Una de las grandes estrellas españolas en estos Juegos Olímpicos va a ser sin duda Carolina Marín, quien va a poder luchar por todo para conseguir en París su segunda medalla tras el oro de Río. La jugadora española ha sufrido un calvario de lesiones, que además de impedirle estar en Tokio, le ha lastrado mucho su carrera y su vida, pero aún así, se ve con muchas opciones de hacer cosas grandes. No tiene un camino fácil, pero su gran mejora en los últimos meses, con la que ha conseguido ganarse un puesto entre las cuatro primeras del ranking mundial de bádminton, invita a ser optimistas. Pero eso sí, reconoce que hay muchas cosas distintas respecto a la antigua Carolina.

Y es que ahora, para empezar es más mayor, porque tiene 31 años, y no esconde que eso es un factor, porque mientras en Río sus rivales eran como ella o un poco más mayores, ahora se enfrenta a jugadoras más jóvenes, pero lo compensa con ilusión, porque llega a Paría con "la misma ilusión que una niña". Pero eso sí, a nivel físico es otra historia, porque ahora los partidos son mucho más duros que antes, ya que las jugadas "duran el doble" y son duelos "mucho más largos". "Yo soy una jugadora atacante y antes con dos ataques me bastaba para ganar un punto y ahora necesito de cuatro o cinco para acabar la jugada", recalcó la onubense en la previa de su debut, este domingo.

Pese a todo, Marín es consciente de que llega a la capital gala en uno de los mejores momentos de su vida, y como tal, tiene muy claro que el objetivo solo puede ser uno, el más grande posible. "El objetivo es ganar una nueva medalla de oro, es la meta que tengo desde que me lesioné dos meses antes de los Juegos de Tokio". Precisamente las lesiones, el mayor debe de una carrera antológica, que pudo ser infinita.

Muchos cambios para volver

Todos estos cambios en el juego y en las rivales han obligado al entrenador de la jugadora de Huelva, Fernando Rivas, a introducir algunas novedades en el proceso de preparación, en el que ha prestado especial atención al factor mental, que de por sí siempre ha sido uno de sus fuertes. "Aparte de tener en cuenta la parte técnica hemos dado prioridad al factor mental, introduciendo en los entrenamientos ejercicios para poner en problemas a Carolina para que tuviera que gestionarlos y afrontar los Juegos no sólo en el mejor momento de la temporada, sino de su carrera deportiva". explico el mismo técnico sobre su pupila. Y es que si hay alguien que sabe levantarse de lo que le pase, esa es Carolina, que va a soñar con todo para hacer realidad su mayor deseo.