Álex Martín4 min lecturaEl Villarreal, tras conseguir una valiosa victoria ante el Getafe, ya está completamente enfocado en su próximo compromiso en LaLiga EA Sports. El conjunto dirigido por Marcelino, que busca superar al Athletic en la lucha por la Champions, quiere dar un notable paso hacia delante en el torneo de la regularidad. A seis puntos de la entidad que suele disputar sus encuentros en San Mamés, su próxima parada es, precisamente, Bilbao. Por ello, el técnico asturiano necesita de todos sus efectivos o, al menos, los que pueda tener disponibles, para tratar de asaltar el coliseo de los rojiblancos. Por ello, no es de extrañar que los castellonenses se hayan llevado una sorpresa con Pape Gueye.
El mediocampista, una pieza clave para el ex técnico del Athletic, sufrió un esguince de tobillo con su selección, haciendo saltar las alarmas en un Villarreal que tuvo que ingeniárselas sin él para ganar a un Getafe que dio un pequeño paso atrás en el torneo doméstico. Por ello, desde que volvió del parón, todos estaban pendientes de un jugador que se ha convertido, con el paso del tiempo, en alguien muy a tener en cuenta en uno de los clásicos del fútbol español.
Tras arrancar la semana pendiente de su estado físico, Gueye se ha podido ejercitar con total normalidad junto al resto de sus compañeros. El medio, que ha podido superar sus problemas físicos, podría apuntar al duelo ante el Athletic, uno que puede marcar un antes y un después en la entidad que suele disputar sus encuentros en La Cerámica, que quiere volver a vivir noches en la máxima competición continental, un torneo que se les ha hecho muy familiar con el paso del tiempo.
No era de extrañar la preocupación del Villarreal en un Gueye que se ha establecido como alguien fundamental para el ‘Submarino Amarillo’. No en vano, hay que tener en cuenta que, en el torneo de la regularidad, ha disputado 25 encuentros, anotando dos goles en el proceso. El medio, que ha sido titular en el 75% de las ocasiones, ha disputado el 70% de los minutos, por lo que su baja supuso un duro golpe para un club que necesita volver cuanto antes a una Champions cada vez más cotizada y exigente.
Mientras tanto, el que no ha podido entrenarse, hasta el momento, con un Villarreal que quiere dar un golpe de efecto es Nicolás Pepe. El atacante, que se ha tenido que mantener al margen del grupo en las últimas horas, es un foco de preocupación para los de Marcelino. Eso sí, esto no parece que dure mucho tiempo, ya que se espera que, en los próximos días, pueda volver a la dinámica de grupo, dando, de esta forma, una nueva gran noticia a un técnico que se quiere reivindicar ante el que fue su equipo.