Como acostumbra a verse en los últimos veranos, a los clubes españoles les cuesta inscribir a sus fichajes en LaLiga. Jugar con el fair play financiero tiene sus límites y no todo acaba con la llegada de un jugador. En el caso del Valencia, en el día de ayer inscribió a uno de sus fichajes, aunque lo cierto es que lleva dos en lo que va de mercado: Rafa Mir y Stole Dimitrievski.
Muchos valencianistas se preguntan por qué tan solo se ha conseguido inscribir a Rafa Mir en LaLiga. Y eso que Dimitrievski fue el primero en llegar. Tras acabar su contrato con el Rayo Vallecano, el Valencia aprovechó la oportunidad para reforzar su portería ante la posibilidad de que Mamardashvili se terminase marchando. No fue un fichaje complicado, puesto que sí que estaba apalabrado desde hace unos meses ya.
Más difícil fue el de Rafa Mir y quizás por eso el Valencia ha decidido inscribirlo antes. Quizás también porque su portería está bastante cubierta ahora mismo con Mamardashvili y el resto de los porteros como Jaume Doménech, que ya formaban parte de la plantilla de Rubén Baraja la temporada pasada.
Tal y como informan desde SuperDeporte, el club valencianista es optimista a la hora de cerrar el fichaje de Dimitrievski. Tan solo se tienen que cerrar algunos pequeños flecos con respecto a sus documentos, pero todo parece estar en regla. Lo más llamativo es que el guardameta encaja a la perfección en el fair play financiero del club valenciano. De hecho, se espera que se inscriba en los próximos días.
Mientras tanto, Rafa Mir no ha caído de pie en esta pretemporada. En los dos encuentros amistosos que ha disputado, el delantero cedido por el Sevilla no ha conseguido estrenarse, quizás también porque se esté adaptando aún a la dinámica y el estilo de juego de Rubén Baraja.
En el Valencia están pendientes a la posible salida de Javi Guerra. El canterano cuenta con varias propuestas en LaLiga, pero de momento no terminan de ajustarse a las pretensiones que pide el club. Equipos como la Real Sociedad o el Girona lo quieren, pero parece que los vascos finalmente se habrían olvidado de él. Ahora su máximo deseo está en contratar a otro exvalencianista para tapar el hueco que dejará Mikel Merino al marcharse al Arsenal de Mikel Arteta, como es el caso de Carlos Soler.