La petición de Luis Suárez a Lasarte antes de su fatídica lesión tardó demasiado

"Las cosas de Dios, del destino... llámalo como quieras", explica el futbolista en declaraciones difundidas por la UD Almería

La petición de Luis Suárez a Lasarte antes de su fatídica lesión tardó demasiado
Luis Suárez, jugador del Almería. - Instagram / @luissuarez.26
Sara Portillo MayaSara Portillo Maya 4 min lectura

Luis Suárez estaba de dulce el pasado domingo en el Power Horse Stadium, en un derbi andaluz entre Almería y Granada en el que estaba provocando la euforia en la afición local. Pero pasó de un sueño a una pesadilla: en poco más de cinco minutos anotó tres goles e hizo que su equipo se pusiera por 3-0 en el luminoso. Después, una mala caída en un intento de anotar otro gol (con un marcador que reflejaba 3-2), cayó. Tuvo que ser sustituido, salió en camilla del terreno de juego y fue directo al hospital. El futbolista sufre una fractura incompleta del peroné de la pierna izquierda.

Ahora ha roto su silencio en declaraciones difundidas por el propio club en las que ha asegurado que le "toca desde otras facetas ayudar a los compañeros". Corría el minuto 80 de partido cuando apoyó mal el pie izquierdo en el césped, tras un intento de remate. Ahora tendrá que estar unos tres meses de baja. Asegura que trata de "afrontarlo de la mejor manera posible y con ganas de volver pronto". Además, deseo suerte para que "ojalá que el viernes sea la primera victoria" del Almería. No será fácil: se mide al Athletic en San Mamés.

También le lanza un mensaje a la afición: "Le quiero pedir a la afición que tenemos que estar con los jugadores que están dentro del campo y los que no estemos dentro vamos a seguir en la misma dinámica de la afición, apoyando al equipo, apoyando a nuestros compañeros, a nuestros jugadores para que cada partido cogerlo como si fuese una final porque necesitamos la primera victoria que es lo que nos va a dar la máxima confianza", solicita.

Y, poco después de explicar cómo fue la jugada en la que cayó lesionado, explica que solicitó ser sustituido dos minutos antes de que sucediera. Su nombre estaba apuntado como el siguiente en salir del terreno de juego, pero no dio tiempo. "Quiero chutar de primeras, no le doy al balón y continúo bien porque no me había pasado nada, como el balón quedó un poco alto quería darle de volea, pero con la intención de que no se me fuera para arriba, hago el apoyo de la pierna izquierda casi doblado y cuando apoyo al césped, al estar tan seco por el calor que hacía, se me quedan los tacos clavados y noto automáticamente el crujido", expone.

Y desvela que "había pedido el cambio un par de minutos antes porque en la pausa de hidratación había avisado al cuerpo técnico que tenía los gemelos muy cargados". "Las cosas de Dios, el Destino, llámalo como quieras...", expresa.

El contraste de alcanzar la gloria a caer en la terrible lesión, lo explica así para concluir: "Estaba siendo un día espectacular, lo primero al acabar el primer tiempo era una sensación de no creérselo para mí porque siempre he estado a punto de meter tres goles, pero ni en Segunda, ni cuando estaba en Segunda B lo había podido hacer, y hacerlo en Primera División era un nuevo logro para mí, para mi carrera, para todos los años de trabajo y la verdad que era una sensación espectacular de alegría, pero al final el partido se dio como se dio".