Alejandro Sáez3 min lecturaFernando Pacheco, canterano del Real Madrid, regresa este fin de semana a la que un día fue su casa, defendiendo ahora la portería de un RCD Espanyol al que llegó en el último instante del pasado mercado invernal. Su salida de Almería no fue fácil, al igual que su corta etapa como guardameta rojiblanco. Así lo ha manifestado el propio cancerbero en una entrevista con DAZN, donde ya asentado como portero perico, explica el calvario que vivió de almeriense.
"Cuando llego el primer día a Almería, el entrenador prácticamente me dice que se ha enterado hace unas horas de que llegaba. Ahí ya sabía que lo iba a tener complicado", relata Fernando Pacheco, quien también era consciente de la fuerte competencia que existía bajo palos en la portería de la UD Almería: "Entiendo la situación y entiendo que Fernando empieza la Liga a muy buen nivel. Es un chico excelente y se lo ha ganado".
"Yo entendía que tenía que esperar mi momento", dice Pacheco, quien reitera que no puso "ningún problema". "Esperé mi momento, vi que podía haber llegado y no llegó y la conversación que yo consideraba que tenía que tener no se tuvo y cuando se tuvo ya era tarde", apostilla el cancerbero sobre su relación con Rubi, técnico de la UD Almería.
"Desde que llegué al Almería noté que no tenía feeling con el entrenador y ya vi que sería muy difícil tener una oportunidad", recuerda sobre Joan Francesc Ferrer 'Rubi', al tiempo que reconoce que no se lo pensó dos veces cuando surgió la opción del Espanyol: "Yo ya le comenté que respetaba su decisión, pero, cuando a mí me llaman para ficharme, la película es diferente a la que me encuentro cuando llego. Apareció la oportunidad del Espanyol y dije que teníamos que conseguirlo como fuese".
Tras una primera parte de la temporada en la que la portería del Espanyol generó muchas dudas, en su debut ante el Elche Fernando Pacheco disipó todas las dudas entre la afición perica. Había un relevo de garantías a Diego López, lo que él considera todo un "halago". "Sobre todo cuando llegas y tienes el gusanillo del debut y de querer causar una buena impresión. Y, si ha sido así, estoy muy contento. Diego López es muy amigo mío. Lo admiro y lo respeto mucho, pero cada uno debe hacer su camino. Ojalá las historias se parezcan en el buen sentido, pero cada uno debe hacer su camino", apostilla Fernando Pacheco, quien ahora vive una nueva vida en el Espanyol.