Aitor Torvisco8 min lecturaEl mercado veraniego de fichajes en el Sevilla FC se ha cerrado con un total de ocho incoporaciones, con Mariano Díaz y Boubakary Soumaré uniéndose a Loïc Badé, Fede Gattoni, Adrià Pedrosa, Djibril Sow, Orjan Nyland y Dodi Lukébakio. Además, se han marchado 12 jugadores, con muchas rescisiones que finalmente no salen tan caras según ha argumentado Víctor Orta: traspasados salieron Yassine Bono, 'Tecatito' Corona, Karim Rekik e Iván Romero; se marcharon cedidos Gonzalo Montiel, Óscar Rodríguez, Thomas Delaney, Ludwig Augustinsson y José Ángel Carmona y se fueron libres Papu Gómez, Oussama Idrissi y Rony Lopes. El saldo de operaciones alcanza la veintena y el gasto de inversión, de unos 30 millones de euros, le coloca como "el cuarto club que más ha gastado en LaLiga". Así lo reivindicó el director deportivo nervionense, que a pesar de ello admitió haber intentado hasta el final el fichaje de un central, al tiempo que reconoció "trabajar desde ya" en contratar lo que ha quedado pendiente, ya sea con agentes libres -el club tiene una ficha disponible- o "pensando desde ya en el mercado de enero".
"Tengo que recuperar algo de sueño poco a poco, pero estoy bien. Estoy feliz y contento por cómo ha ido el mercado. Como club, desde todos los ámbitos, hemos dado lo mejor en un mercado muy complicado en el ámbito global. Cuando se da lo mejor que tienes creo no se puede pedir más", comenzó explicando Víctor Orta en una extensa entrevista para los medios del Sevilla FC en la que repasó, línea por línea, como queda la plantilla de Mendilibar y contestó algunas de las preguntas que se hace la afición: por qué al final no llegó un central, por qué se inscribió a Januzaj, por qué no se hicieron algunas ventas o qué piensan hacer con el dorsal que queda disponible (el '4').
"No quiero poner excusas sobre lo que nos pudimos encontrar. El punto de partida lo conocíamos, la hoja de ruta era reducir el coste de plantilla y reforzarla. De los 11 que se han marchado (12, si se cuenta al canterano Iván) sólo a uno se le podía considerar como titular, el resto venían de cesión o no contaban. De 36 jugadores hemos pasado a 24, hemos reducido el coste de plantilla en 32 millones de euros y se han reforzado bastantes líneas invirtiendo 30 millones en ocho fichajes. Somos el cuarto club que más ha invertido en Primera división y creo que se han cumplido al 90 por ciento los objetivos que nos habíamos marcado", manifestó el madrileño, que asegura que esto no para: aún pueden fichar agentes libres y mira ya a la ventana invernal.
"Tenemos que pensar desde ya en el mercado de enero, aunque aún hay margen también para poder tomar decisiones. Siempre hay cosas para mejorar". "Ayer tuvimos opciones de fichar a un central y lo hemos intentado fichar hasta el último día con nombres importantes, jugadores de renombre internacional que han triunfado en grandes clubes, pero teníamos muchas cosas que estudiar. No pudimos fichar un central, pero hay que ver lo que tenemos", resaltó, pidiendo confiar en la juventud y recordando que sólo se han salido del modelo con dos jugadores, lo que entre líneas suena a enésimo rechazo a Sergio Ramos. Además, Rob Holding acabó en el Crystal Palace, Lenglet se fue al Aston Villa y César Montes, al Almería; mientras que el Oporto cerró la puerta a David Carmo.
"Hubo alguna excepción como la de Mariano y Nyland. La de Mariano fue oportunidad de mercado de última hora, estaba libre y tiene un coste salarial mínimo para ese nivel de jugador. Con Nyland buscábamos experiencia. Ya en el resto se han buscado juventud y opciones futuras de plusvalía con jugadores que llegan en su cénit. Unos mediante traspasos, otros con cesiones con opciones de compra que se puedan ejecutar como ya se hizo con Badé... Hemos tratado de enriquecer las herramientas para que luego el entrenador pueda decidir, desde nuestra capacidad, nuestra limitación, nuestros conocimientos...", opinó el director deportivo.
"Tuvimos propuestas de equipos 'top' que ofrecían cantidades por encima de los 10 millones por hasta cuatro jugadores. Las hemos rechazado y eso también es comprar. Eso demuestra que no hemos caído en la desesperación, no íbamos a vender por vender. No ha sido fácil tomar esas decisiones para contar con jugadores que son campeones. Tienes que esperar a que lleguen cosas por esos jugadores que sí quieres que salgan", explicó Orta, que recordó las cuentas obligadas antes de aceptar un traspaso: "Si sacas a uno por 10 millones, LaLiga sólo te permite reinvertir cinco de ellos. Es decir, por cinco millones tenías que encontrar a un sustituto que mejorase al que había".
"Januzaj tuvo varias alternativas para salir que no le agradaron. Ningún jugador se puede quedar sin licencia por ley, pero además porque tenemos mucho respeto por todos los futbolistas, así que fue inscrito", declaró sobre el extremo belga, que aún podría salir, ya que siguen abiertos varios mercados como los de Arabia Saudí y Turquía, dos de los lugares a los que no le ha convencido marcharse.
Fue el único de los llamados descartes que no se fue ayer. Óscar salió cedido al Getafe CF asumiendo el Sevilla FC más de la mitad de su ficha; mientras que Papu e Idrissi rescindieron y sólo pudo hacerse caja con el regreso del 'Tecatito' a Rayados de Monterrey. Sin embargo, Orta defendió estas rupturas unilaterales no sólo desde el punto de vista económico, sino también desde el prisma financiero: "La rescisión de un futbolista con más de un año de contrato salva más dinero para el club que cerrar una cesión. El equipo que se lleva la cesión rara vez asume el cien por cien de la ficha -un 60-70 siendo optimistas- y, al año siguiente, el jugador vuelve con contrato. Así, el próximo verano te ahorras el coste de amortización y de salario de todos ellos, pero además puedes trasladar a esta 23/24 el 25% de ese ahorro previsto de cara a calcular el límite salarial. Reducir número de efectivos, además, era otro de los objetivos".
