Papu Gómez, ex futbolista del Sevilla y ahora en el Monza, está viviendo uno de los peores momentos de su carrera deportiva después de que se haya desvelado que dio positivo en un control antidoping cuando era jugador del Sevilla la pasada temporada. Esto provoca que el argentino esté temporalmente inactivo a la espera que se resuelva su caso. Mientras esto ocurre, hay otro caso de positivo por dopaje investigado que está en marcha y que no es nada halagüeño para las esperanzas que pueda albergar Papu Gómez. Se trata del de Paul Pogba quien ha visto como sus alegaciones han sido rechazadas y se enfrenta a una sanción de entre dos y cuatro años de suspensión.
Según informa La Gazzetta dello Sport, prestigioso medio de comunicación deportivo italiano, Paul Pogba no ha conseguido convencer al fiscal antidopaje y el caso será remitido al juzgado deportivo. El centrocampista francés está suspendido de manera preventiva después de que diera positivo por testosterona en una prueba antidoping. Ahora el francés afrontará un proceso judicial y deportivo y se enfrenta a una inhabilitación de hasta cuatro años en caso de que los jueces decidan que consumió de forma consciente, la cual se puede quedar en sólo dos años de suspensión si alcanza un acuerdo con la Fiscalía en caso de que la causa continúe adelante.
Paul Pogba dio positivo en una prueba antidoping el pasado 20 de agosto en el partido que enfrentó a la Juventus contra el Udinese que terminó con 3-0 para los turineses y donde el internacional francés no disputó ningún minuto en aquel encuentro. El resultado de la prueba se dio a conocer el pasado 11 de septiembre.
Este caso no es un precedente demasiado halagüeño para Papu Gómez quien está sancionado por dar positivo en un control antidoping en noviembre de 2022. El argentino dio positivo por terbutalina, un fármaco prohibido. Según argumentó Papu Gómez su ingesta fue de forma involuntaria o inconsciente, tal y como ha argumentado Paul Pogba al cual no le ha valido para detener el proceso disciplinario.
Es por ello que Papu Gómez, a sus 35 años de edad, se enfrenta a una suspensión de al menos dos años, lo cual podría poner en riesgo el final de su carrera deportiva. El futbolista no puede jugar actualmente con el Monza debido a este proceso. El atacante argentino se incorporó al conjunto italiano en el mes de septiembre una vez rescindió su contrato con el Sevilla, en donde ha estado en las últimas temporadas.