Álvaro Palomo3 min lecturaSuperior en la primera mitad del Girona, el tanto de Iván Martín en una acción aislada resultó un jarro de agua fría para el Sevilla, si bien la sentencia para los de García Pimienta llegó en el minuto 71' tras la transformación de Abel Ruiz de un penalti por manos de Isaac Romero en el área sevillista.
Una acción que no vio en primera instancia el árbitro de la contienda Sánchez Martínez, pero de la que le avisó su asistente en el VAR, Iglesias Villanueva, que le recomendó que la revisara en la pantalla. Y ahí comenzó un largo diálogo entre los colegiados que se alargó durante varios minutos y que, como indica el protocolo, fue hecha públco por la RFEF a través de sus redes.
Una conversación que ha generado polémica tanto en cuanto Sánchez Martínez necesitó pedir numerosas imágenes para percibir si realmente el balón impactaba en la mano del delantero de modo que fuera suficiente para señalar penalti. De hecho, en el audio del VAR, transcrito además por la Federación, se escucha y se lee como el árbitro llega a decir: "Eso no me vale".
Todo arrancó cuando Iglesias Villanueva llamó la atención del árbitro principal: "Por favor, vente a verla. José, te recomiendo un OFR". Primero pidió ver el punto de contacto, y después, el colegiado, solicitó muchos puntos de vista diferentes, cámara lenta, zoom, para intentar ver con claridad el momento del impacto, que se produjo cuando Isaac saltó de espaldas con los brazos no muy separados del cuerpo. "Párame el punto de contacto y dame otra imagen. Mira, párame el punto de contacto, por favor. Quiero ver cómo de abierta está mano; dame un reverso, por favor", pidó el árbitro, lo que demoró considerablemente la decisión, hasta que hubo una imagen que le convenció: "Vale, perfecto. Voy a sancionar penalti por tarjeta".
Finalmente, señaló pena máxima y alimentó una dramática estadística para los sevillistas desde que se impuso en el fútbol español la utilización del VAR. Y es que el Sevilla, como recoge el perfil de X @LaLigaenDirecto, se ha convertido en el equipo con más penaltis en contra pitados, un total de 14, tras la intervención del VAR desde que esta herramienta se instaurara en el fútbol español. Es decir, que el rearbitraje de las jugadas ha perjudicado al Sevilla más que a cualquier otro equipo, al menos en los referentes a las penas máximas. Dato para nada baladí.