Villa Gómez4 min lectura"En las últimas horas ha fallecido en Sevilla, a los 90 años de edad, el empresario Juan Silverio de la Chica Viso, quien fuera dirigente del Sevilla FC en diferentes cargos desde la etapa en la presidencia de Eugenio Montes Cabeza, a finales de los años setenta. Más adelante, en el periodo de transición entre las etapas del abogado y socio número 1 (que feneció a los 92 años el 30 de junio de 2008) y de Gabriel Rojas, ocupó, incluso, el cargo de presidente de la entidad durante unas semanas, en 1984. También formó parte de la cúpula directiva del club nervionense durante los mandatos presidenciales de Rafael Carrión, Roberto Alés y José María del Nido Benavente. En esta última ocupó, además, el cargo de vicepresidente", explica este miércoles la entidad nervionense en un comunicado publicado en sus medios oficiales en memoria del antiguo hermano mayor de La Estrella entre 1976 y 1984 y medalla de oro de la señera hermandad trianera.
Juan Silverio, que llegó a jugar en el equipo juvenil sevillista, era el directivo encargado de las instalaciones en los años previos al Mundial de España de 1982, por lo que dirigió los trabajos de remodelación del Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán como sede de aquella magna cita. Salió del consejo de administración en 2007, tras lo que recibió la insignia de oro y brillantes del club. Posteriormente, seguiría vinculado a la institución de su vida unos años más a través de la Fundación. "El Sevilla FC quiere mostrar su más sentido pésame a familiares y amigos de Juan Silverio de la Chica. Descanse en paz", finaliza el documento, que honra y glosa la trayectoria de quien en 2011 fuera declarado 'Trianero de Honor' y que abordó los arreglos en la capilla de la calle San Jacinto, unas obras auspiciadas por el arquitecto Antonio Delgado Roig.
Como recuerdan los compañeros de 'Pasión en Sevilla', Juan Silverio pudo acompañar por última vez el pasado otoño a la bellísima dolorosa atribuida a Martínez Montañés durante su salida extraordinaria con motivo del 25º Aniversario de su coronación. Además, era hermano de la Esperanza de Triana, habiendo sido el encargado de costear el retablo cerámico de la misma en la Plaza del Altozano con motivo de su coronación canónica en 1984 y del azulejo que luce en la fachada de la Capilla de los Marineros, que era de su propiedad y donó a la hermandad. En materia cofrade, dirigió la adecuación de la capilla del Rocío de Triana, corporación a la que también perteneció. Desde ESTADIO Deportivo nos unimos al dolor de su barrio, de toda la ciudad de Sevilla y, especialmente, de quienes sentían como él el rojo y el blanco de Nervión.