En los últimos meses su nombre sigue sonando con fuerza, aunque aún no ha encontrado (o se desconoce) un equipo en el que poder competir de forma profesional, aunque ha sonado para el Rayo o el Rayados de Monterrey. Lo cierto es que después de su periplo sevillista... parece que nada ha vuelto a ser como antes para Isco Alarcón en cuanto a carrera profesional se refiere. En una entrevista con ESTADIO Deportivo, Gudelj habló en su día sobre la polémica salida de Isco Alarcón del Sevilla FC: “Yo en los rumores y eso no me meto”, aseguró. Para luego agregar: “El tiempo que Isco ha estado aquí, todo bien. Buen chico, buen jugador. Una pena que no haya salido como el club y como él querían. Yo al final le deseo toda la suerte que se merece”, dijo. Isco Alarcón llegó al Sevilla FC motivado por la llamada de Julen Lopetegui, pero todo se fue truncando poco a poco. Fueron muchos los rumores a su salida y seguro que más de uno recordará aquello que dijo Edu García sobre que “entre Isco y Monchi no sólo hubo palabras”.
Tras esa experiencia, su carrera deportiva se ha ido complicando, después de ser un jugador que lo ha ganado prácticamente todo, y los rumores que salen a la palestra contrastan siempre con el silencio del futbolista que ha decidido hablar ahora en una entrevista con Marca. Un lustro ha pasado de momentos muy delicados y en los que su final en el Sevilla FC tiene algo que ver. Eso dice él, quien habla sobre muchas cuestiones, como su deseo de seguir compitiendo y encontrar un equipo “competitivo y que intente jugar bien al fútbol”, eso es para él, según cuenta, más importante que el dinero: “Si no, no me hubiese ido al Sevilla”, reconoce.
Es entones cuando va al meollo del asunto, contando su verdad sobre lo sucedido. Nadie mejor que él, uno de los grandes protagonistas de esta historia, para narrarlo. Después de culminar su contrato con el Real Madrid, Isco Alarcón terminó recalando en el Sevilla FC, por entonces dirigido por Julen Lopetegui quien es “uno de los entrenadores con los que mejor” ha estado y “mejor rendimiento” ha tenido. No le faltaban ofertas, dice, y es normal teniendo en cuenta el enorme palmarés que ya tenía a sus espaldas, pero él se marchó a ese Sevilla que consideró “una oportunidad muy bonita”.
Al final, los caminos de Julen Lopetegui y el Sevilla FC se separaron. Aterrizó en Nervión Jorge Sampaoli y con el argentino según Isco, “bien también”. Y es en ese momento cuando el que fuera jugador sevillista relata lo siguiente: “Cuando se va Lopetegui y se acerca la ventana del mercado de invierno, yo veo muchas cosas raras dentro del club”, comienza. Ahí es cuando detalla que su representante recibió una llamada para darle una salida, sin que previamente le dijeran nada a él. “Así que, en cuanto me enteré, fui a hablar directamente con Monchi” y, según detalla, le pidió que fuera sincero y arreglaran el asunto: “Estoy a vuestra disposición”. A raíz de ahí… “se tuerce todo”.
“Tras esa conversación, Monchi fue diciendo que yo me quería ir, algo que no era cierto”, asegura Isco. Quien además apunta que comenzó a atosigarlos diariamente a él y a su abogado para “firmar” su “rescisión”. Otra vez decidió hablar con el por entonces director deportivo del Sevilla FC: “Mira Monchi, tú no estás siendo sincero ni conmigo ni con la gente a la que cuentas cosas, yo me quiero quedar y tú vas diciendo que yo me quiero ir”. Y es ahora cuando cuenta lo más “fuerte” de lo que sucedió, justo después de “un entrenamiento, camino de los vestuarios”. Le dijo a Monchi que “era la persona más mentirosa” que se había “encontrado en el mundo del fútbol” y que este le “agredió”: “Vino hacia mí, me cogió del cuello, nos apartamos y ya nos tuvieron que separar del todo”, asegura. Después de ese episodio, Isco “no quería seguir ahí bajo ningún concepto”. Los “de seguridad” terminaron participando para separarlos. Era un contexto, según Isco, en el que “tanto Monchi como el club estaban pasando por momentos delicados”. No obstante, se sobrepasó “la barrera de la violencia”.
Eso sí, le “daba pena” puesto que hizo “muy buena relación” con sus “compañeros”, además también guarda buenos recuerdos de la afición: “Me trató de maravilla”. No obstante, según explica el jugador, tomó la decisión de irse por lo siguiente: “No podía estar a gusto en un club en el que el director deportivo me agrede y nadie se pronuncia, ni se disculpa. Ni por la agresión ni por todas las mentiras que iba filtrando”, zanja.
Además, explica que en el Sevilla “estaba contento” y pese a que el club pasaba por un “momento deportivo complicado”, el sabía que saldría adelante. Lo dice para desmentir algunas informaciones en la “prensa de Sevilla” sobre que Isco se “bajó del barco”: “Eso no entra dentro de mi mentalidad, he estado muchos años en el Real Madrid y nunca me he rendido”. Así que cogió sus maletas y se fue “dolido” de un club al que llegó “con la idea de jugar con el entrenador que siempre” había “apostado” por él, con un episodio difícil: “Cuatro meses en Sevilla, después de una mudanza con tres niños…”. Dijo adiós al Sevilla “decepcionado” y con muchas dudas sobre su futuro, aunque con la fortaleza y “la ilusión por seguir jugando”.