"Por encima de todo, la sensación es de mucha emoción. Tengo muchos vínculos familiares con Sevilla, donde he vivido. Participé durante los años 70 de este club como espectador. Cuando vine como entrenador, lo sentí. Agradezco a los dirigentes del Sevilla FC que se hayan fijado en mí para cambiar la cara del equipo y para hacer feliz a una afición que siempre se ha volcado con los suyos y debe recibir lo que se merece. Ojalá dentro de un tiempo lo veamos todo diferente", comenzaba diciendo Quique Sánchez Flores, nuevo entrenador nervionense, durante su presentación en la noche de este lunes ante los medios de comunicación, donde anunció que quiere "un equipo que compita, que crea en sus posibilidades, donde los propios jugadores demuestren el nivel que tienen. Eso no se ve en los entrenamientos, sino en el campo, pero hay que analizarlo con naturalidad y humildad para revertirlo. Habrá que echar las horas que sean necesarias".
El madrileño no quiso hablar de Mendilibar o Alonso, ya que "los compañeros que han estado al frente del equipo han hecho lo que han podido", mostrándose incómodo con una evaluación tan temprana: "No soy quién para decir públicamente lo que creo que han hecho mal. Estoy recién aterrizado y 'rozado' con los jugadores, por lo que me cuesta hacer un diagnóstico. A lo mejor dentro de un tiempo sí puedo". El gran problema es el consabido de la enfermería, porque, a falta de emitir una lista de convocados para su debut este martes en el Nuevo Los Cármenes, adelantó en la sala de prensa que cuenta con "14 jugadores del primer equipo y muchos chicos jóvenes en los que, si hay que confiar, se confiará", recordando que el Sevilla "siempre ha tenido una gran cantera" y que "ésta es la realidad últimamente en LaLiga española". Seguidamente, habló de todos estos asuntos:
"En las casas grandes (clubes, familias) nunca hay problemas pequeños. Lo tendremos en cuenta para, desde el conocimiento de la plantilla, conseguir un mejor rendimiento. Queremos transmitir ilusión, pasión y esperanza de éxito. Es la única misión que tenemos en el Sevilla; no me parece poco, sino mucho, sobre todo un gran reto teniendo en cuenta de dónde venimos"
"Miedo a otras cosas, no al fútbol, que es pasión"
"¿Europa? Sólo miro al partido de Granada"
"Aunque llevo muchos años, empezó como entrenador antes que yo. Me reuní hace 20 años con él cuando empecé en la cantera del Real Madrid, me acogió en su casa y me dio los vuelos que necesitaba. Siguió la amistad y el respeto; quedamos en unirnos en un tándem alguna vez. La empresa lo merece. Sigo con el 'staff' con el que he conseguido cosas importantes, y se une Jose"
"Esa pregunta no la voy a contestar nunca jamás. El Sevilla es libre de tomar sus decisiones; es una entidad enorme. Cuando estás sin entrenar, tu nombre vuela arriba y abajo sin que puedas decir nada. Siempre he tenido el mismo teléfono; es fácil encontrarme"
"Habla muy bien de los capitanes que arroparan al anterior entrenador. Es de lo mejor que te puede pasar en esta profesión. Para mí, la mente no es algo separado en el ser humano. Lo primero es ser empático, hablar simplificando mucho para las mentes que escuchan, que, cuando están distraídas o preocupadas, escuchan de otra forma. Ojalá la experiencia en situaciones parecidas en Getafe y otros equipos nos ayude para que esas mentes produzcan lo que tienen que producir"
"Los chicos no están bien, porque se entrenan para ganar. Sí que tenemos clara la calidad humana. Ese tipo de preguntas los entrenadores las hacemos antes de firmar. Haremos lo posible para empujar"
"Jugamos en función de los jugadores que tenemos. Hemos jugados con amplitud y centros, hemos contraatacado, hemos dominado... Nos gusta lo que vemos; no nos gustan tantos sin entrenarse. Los delanteros, cuando los tuvimos en contra, los respetábamos y decíamos 'cuidado En-Nesyri', 'cuidado Mariano'... El peor pecado que podemos cometer los entrenadores, como dijo Bielsa, es hacer que los que pueden volar, caminen. Intentaremos que los que caminan, vuelen"
"Debemos ser inteligentes hasta donde nos dé el físico y la mente. Hay lugares que nos pueden llevar al éxito. Como filosofía de vida, no creo en los atajos, pero ésta es una competición más corta que nos puede dar el éxito para llevar al Sevilla a Europa, algo a lo que están acostumbrados aquí. Vamos a dejarnos el alma para transmitir lo que queremos y conseguirlo"
"Nunca había tenido dos días tan frenéticos y que coincidan en que acaben en un partido mañana mismo. He hablado con el presidente y con Víctor; sabemos cuál es el escenario y tenemos que dar la cara, empujar con todo. Que no nos falten dinámica ni pasión, pero ojalá lleguen días más tranquilos"
"Todos somos conscientes de que una hora de entrenamiento no alcanza para cambiar un momento tan importante de la temporada, pero es el primer partido con el nuevo entrenador. Confiamos en que los jugadores, si tienen un poco más, lo den. Creo en la redención. Estar al lado de los que ganan es fácil, pero no de los que pierden. Todos tienen derecho a ella y es humilde reconocerlo"
"Queremos que las cosas salgan bien. No sólo en el Sevilla, sino que en el fútbol haya normalidad. Que los aficionados disfruten, y que los jugadores y dirigentes lo hagan bien. Cualquier otro escenario es contra natura. La tristeza es otra cosa"
"No me lo planteo como un reto personal. Los tengo todos prácticamente solventados. Lo hago con toda la emoción para que sirva para todos. Ojalá tengamos una rueda de prensa pronto muy diferente a ésta"
"Siempre el último es el más importante, sin perder el respeto a lo anterior. Somos conscientes de la envergadura del proyecto y con toda la energía lo afrontamos"
"Soy el de siempre, el que empezó hace mucho tiempo y, bastante después, sigue emocionándose con su profesión, formándose, y afrontando los retos"
"Me dio mucho gusto verlo; nos dimos un abrazo grande. Coincidimos 2-3 años en el Espanyol. Era muy joven y estaba inmerso en cesiones, pero ya apuntaba alto. Cuando llega al Sevilla, se confirmó los pronósticos que teníamos de que iba a ser un jugador importante".