Álvaro Palomo3 min lecturaNo hay marcha atrás en Nervión. El club ha activado el desmantelamiento de la 'vieja guardia' para librarse de las fichas más altas de la plantilla y llevar a cabo una profunda remodelación que ha provocado las salidas de Rakitic, Fernando Reges, Lamela y Óliver Torres, a los que ahora seguirán otro de los futbolistas que ha sido muy importante en la historia reciente de la entidad.
Y es que Marcos Acuña, tras cuatro temporadas como sevillista y con contrato hasta 2025, abandonará Nervión este verano después de haberse tomado una decisión unánime con el beneplácito de todas las partes implicadas. Y es que en la entidad blanquirroja consideran necesaria su despedida, no solo porque su ciclo haya terminado, sino para ahorrarse una ficha importante después de su última renovación de cara al complicado ajuste de la masa salarial y, de camino, obtener caja.
Esta determinación cuenta con el visto bueno del propio carrilero zurdo, que dio lugar a la confusión con un mensaje reciente, pero que tiene clarísimo que su etapa en el Ramón Sánchez-Pizjuán no da más de sí. De hecho, ya lo pensaba de antes, pues tanto el pasado verano como en invierno quiso salir, pero la directiva nervionese le cerró la puerta, primero porque la oferta procedía del Aston Villa de Monchi y después porque no era el momento de cederlo al Villarreal con la permanencia en juego.
Sin embargo, a día de hoy, el club y Acuña han llegado a un acuerdo para un traspaso en la ventana estival que resulte interesante para todas las partes, tanto en cuanto el Sevilla desea obtener algo de rédito por su traspaso consciente de que su edad, 32 años, y que entra en el último año de contrato, limita sensiblemente las ganancias, conformándose con una compensación económica que podría rondar los 2-3 millones de euros. Lo que se ingrese será bienvenido, pues se sumará a la liberación de la ficha.
No obstante, el Sevilla cuenta con la ventaja de que Marcos Acuña se puede revalorizar en la Copa América, donde ya jugó como titular en el estreno ante Canadá, disputando un total de 89 minutos. El 'Huevo' tiene la confianza de Scaloni y su participación puede llamar la atención en el mercado y aumentar su valor.
Así, Sevilla y Acuña se han emplazado a la finalización del torneo para tratar este asunto en profundidad y estudiar las ofertas que haya por el bravo lateral zurdo.