Fernando Mateos4 min lecturaEl Sevilla FC no pudo lograr su segunda victoria consecutiva ante Osasuna. Hizo méritos para ello, pero le faltó efectividad de cara a potería. De ello se lamentaba a la conclusión del choque Xavi García Pimienta, que repitió el mismo once que puso en liza ante el Rayo Vallecano y acertó en líneas generales con sus cambios, mandando de paso un mensaje a aquellos futbolistas que se quedaron sin participar, como Marcao, Montiel, Iheanacho o Pedro Ortiz
Además, una de las decisiones más llamativas del entrenador catalán llegó en el minuto 64, cuando retiró del campo a Pedrosa y Peque para dar entrada a Saúl y Suso. El gaditano ocupó el lugar del ex del Racing en el costado zurdo, pero para cubrir el lateral, el barcelonés ideó un cambio de piezas que llevó a Gudelj al eje de la zaga y a Kike Salas al flanco izquierdo. Todo ello, mientras Valentín Barco, el sustituto natural del ex del Espanyol, se quedaba una jornada más en el banquillo.
Con la baja de Ejuke, muchos pensaron que el argentino podría ser una alternativa como extremo, dado que sobresale más por sus cualidades ofensivas que defensivas. Pero lejos de ello, no sólo no ha ganado un mayor protagonismo más adelantado, sino que ha dejado de ser incluso el 'plan B' en su posición natural. Por ello, todo apunta a que en enero hará las maletas para regresar al Brihhton, que además se guardó la opción unilateral de romper su cesión si no disfrutaba de oportunidades, como está sucediendo.
ESTADIO Deportivo informó días atrás de que dicha posibilidad ya ha tomado forma, aunque el internacional albiceleste quiso negarlo públicamente. "Es todo mentira eso. Yo estoy tranquilo. Quiero jugar y seguir sumando minutos”, afirmó. Pero lo cierto es que ese deseo expresado está lejos de cumplirse. Desde que fue sustituido ante el Athletic en el descanso por sus pobres prestaciones defensivas, sólo ha participado en dos de las siete últimas jornadas de LaLiga, en ambos casos como suplente, sumando apenas 36 minutos en sus apariciones ante Espanyol y Rayo.
Con este panorama, mucho deben cambiar las cosas para que todas las partes no entiendan que lo mejor es poner fin a la situación en el mercado invernal. Este jueves, ante el Olot en la Copa del Rey, tendrá una nueva oportunidad. Pero en el campeonato liguero restan tres jornadas hasta final de año (Atlético, Celta y Real Madrid) y sus expectativas de cara a una mayor presencia en el equipo no son muy halagüeñas. El propio García Pimienta ya dejó entrever antes del choque ante Osasuna que podría ser el propio Barco el que se termine hartando. "Queda un mes entero, jugadores que no están jugando igual empiezan a participar. Cuando llegue el mercado de enero, nos sentaremos a hablar e incluso jugadores que no están jugando quizás pueden pedir salir porque no estén contentos con su situación", deslizó.