Alex Telles se despide de Sampaoli desde Marruecos

Cambiar a un entrenador es una decisión nada sencilla para un club por muy malos resultados que se estén dando. Y menos cuando queda menos del último tercio del campeonato. La gran pregunta que se suelen hacer en los despachos es si habrá tiempo suficiente para cambiar el rumbo del equipo o, por el contrario, el barco terminará yéndose a pique mientras se adapta la plantilla al nuevo líder.

Pues bien, Alex Telles, quien está concentrado con la selección brasileña para preparar el amistoso del próximo sábado con Marruecos, se ha mostrado optimista de cara al futuro del Sevilla FC tras el cambio de comandante, al tiempo que ha tenido unas últimas palabras de agradecimiento para el ya exentrenador del conjunto nervionense: "Creo que los cambios van por un buen camino. Sampaoli es un gran entrenador, ayudó mucho, y espero que tengamos buenos resultados con el nuevo entrenador".

En esta rueda de prensa que concedió en la ciudad marroquí de Tánger, el lateral admitió que se enteró de la salida del preparador argentino tan sólo cuando llegó a la selección y, al parecer, también desconocía que el Sevilla ya había anunciado la contratación de José Luis Mendilibar: "Cuando hay cambios de líder siempre nos toma de sorpresa. Me enteré cuando llegué a Marruecos. Lo mismo ocurrió en la selección".

Y es que en Brasil, el zaguero también ha sufrido un cambio en el banquillo. La 'pentacampeona' está hoy bajo el comando de un técnico interino, Ramón Menezes, debido a que la CBF aún no ha anunciado al sustituto del dimisionario Tite.

Sin embargo, a Telles este tipo de decisiones no le afecta a nivel emocional: "Cuando terminemos aquí, regresaré y daré lo que tengo de mejor para ayudar al Sevilla. Yo me concentro en mi trabajo, en el día a día. Mi preocupación ahora es Marruecos, darle mi mejor versión a Ramón y después volver a mi club y dar lo máximo allá. El futuro se lo dejo en las manos de quien resuelve".

Eso sí, a la vuelta de sus compromisos internacionales, Alex Telles deberá ponerse las pilas para adaptarse a las nuevas órdenes de Mendilibar, quien ya llevará más de una semana trabajando con sus compañeros. A dos puntos del descenso en LaLiga, el técnico vizcaíno tiene la difícil tarea de acabar con los miedos de una entidad y una afición que hacía tiempo que no se veía en semejante tesitura.