Rubiales sigue estando en el ojo del huracán y no hay día que no pase que surja una nueva información. Tras la denuncia este miércoles de Jenni Hermoso ante la Fiscalía General del Estado, dicha denuncia es necesaria "para poder proceder por los delitos de agresiones, acoso o abuso sexuales", según se recoge en el artículo 191 del Código Penal (Rubiales podría ser juzgado por agresión sexual). Ahora se le suma una nueva información sacada a la luz por el diario El Mundo en el que se revela que Luis Rubiales ya estuvo salpicado por otro "abuso de poder" que finalmente quedó calificado como discrepancia jurídica.
Según desvela el diario mencionado anteriormente, existe un segundo informe del subdirector jurídico del CSD (Consejo Superios de Deporte) en el que se avala elevar al TAD a Rubiales por "abuso de poder" con el fútbol femenino. Posteriormente, José Manuel Franco, presidente del CSD lo neutralizó gracias a una resolución en la que afirmó que solo se observaba una "mera discrepancia jurídica", esto permitió a Rubiales seguir en el cargo de presidente de la RFEF.
La subdirectora general del Deporte Profesional y Control Financiero del organismo que depende directamente del Gobierno, concluyó en un informe que Rubiales había incurrido y por lo tanto denunciaban en "una serie de infracciones calificadas como muy graves en la Ley del Deporte, principalmente abusos de autoridad, vulneración de la integridad de la competición, incorrecta utilización de subvenciones o ayudas del Estado y sus Organismos Autonómicos, e incumplimientos de disposiciones estatutarias de la RFEF".
Además, el diario El Mundo revela tal y como se recoge en el informe que Rubiales había tenido un "uso desmedido de las facultades inherentes a su cargo", habiéndose "propasado y aprovechado de las mismas en beneficio propio y no de los intereses federativos", buscando lucrarse de forma personal al recibir "un porcentaje de los ingresos de la RFEF". Esto estaba establecido en su contrato.
Parece que Rubiales sigue muy arrinconado y sus días al frente de la RFEF podrían estar contados. Por el momento sigue vigente su inhabilitación de funciones por parte de la FIFA y además, tras la citada anteriormente, denuncia de Jenní Hermoso, la Audiencia dispone de 2 meses para ver si está admitida a trámite o no. En caso de ser aceptada, Jenni Hermoso y Luis Rubiales tendrían que acudir a declarar como denunciante y acusado respectivamente. Hasta 6 meses podría alargarse este proceso. En caso de una posible condena, Rubiales podría recibir una pena de 1 a 4 años de cárcel o una multa si el juez lo determina.