Francisco Salas3 min lecturaEl extremo surinamés Sheraldo Becker, del Union Berlin, se ha destapado en las últimas horas como la principal opción de la Real Sociedad para reforzar el la parcela ofensiva. La marcha del francés Momo Cho al Niza la pasada semana, sumada a las bajas de Take Kubo y Umar Sadiq, que se encuentran disputando la Copa de Asia con Japón y la de África con Nigeria, respectivamente, han dejado a Imanol Alguacil con pocas opciones en el frente de ataque.
Se trata de un extremo diestro de 28 años, nacido en Países Bajos y formado en la cantera del Ajax. Destaca por su velocidad y su potencia, que le permiten actuar también en las tres posiciones del frente de ataque. La pasada temporada fue uno de los artífices de la histórica campaña del conjunto berlinés, anotando 11 goles y repartiendo 7 asistencias en la Bundesliga, que sirvieron a su equipo para lograr la cuarta plaza, que les dio acceso disputar la fase de grupos de la Champions League, de la que ya están eliminados.
Esta campaña, Becker ha acusado el bajón de su equipo, que bordea los puestos de descenso y tan solo ha anotado 3 goles en 18 partidos. La bajada de rendimiento y el hecho de que su contrato finalice en junio, lo convierten en una gran oportunidad de mercado para un conjunto txuri-urdin falto de gol y al que la apuesta por los canteraros no termina de salirle bien, mientras recupera efectivos.
No es el primer jugador relacionado con el equipo donostiarra en este ventana invernal. El delantero kosovar del Lille, Edon Zhegrova y el estadounidense del Borussia de Dortmund, Giovanni Reyna, llevan días sonando con fuerza. También han sondeado a un viejo conocido de LaLiga como Bryan Gil, quien no vería con malos ojos volver a España, donde alcanzó su mejor nivel en el Sevilla. Pero todo indica que la dirección deportiva dirigida por Roberto Olabe ha fijado ahora su mira en Becker.
La Real no es el único equipo español interesado en el jugador de Surinam, pues también está cogiendo fuerza del opción del Villarreal, otro conjunto necesitado de atacantes tras la lesión de larga duración de Yeremi Pino. No es la primera vez que el submarino amarillo se entromete en una operación del equipo blanquiazul, al que ya arrebató este verano al noruego Sorloth, quien llevaba dos años brillando en el Reale Arena.