Aitor Torvisco6 min lecturaEl precio de Mikel Merino, ésa es la cuestión. El nombre del centrocampista de la Real Sociedad es otro de los culebrones del verano pero, como sucede en el caso del 'athleticzale' Nico Williams, la expectación mediática que genera un futbolista campeón de la Eurocopa por el que suspiran clubes como FC Barcelona, Atlético de Madrid o Arsenal FC es tan excesiva que llega a adelantar a la propia operación. La realidad a día de hoy, según transmiten las partes, es que no ha pasado nada significativo desde que se marchó con la selección española. La entidad donostiarra le hizo llegar una última oferta de renovación para que la estudiase este verano y Bahía Internacional, agencia que representa al mediocentro, ha mantenido diversos contactos con los conjuntos ya mencionados sin que, por el momento, haya llegado propuesta en firme alguna a las oficinas de Anoeta. Eso sí, para esta próxima semana sí se esperan novedades, ya que el conjunto inglés ha tomado definitivamente la iniciativa y "tiene sensaciones positivas"... pero también la firme intención de evitar subastas o grandes dispendios.
Ya saben los pretendientes de Mikel Merino que la Real Sociedad va a ser un hueso muy duro de roer. Lo sabe especialmente el Atlético de Madrid, después de varios intentos infructuosos por incluir al pamplonica en la operación del traspaso ya confirmado de Robin Le Normand. La venta del central desvía todos los focos hacia Merino porque es otro de los asuntos capitales para la planificación y, al mismo tiempo, sirve de termómetro para entender cómo están las posturas a día de hoy. Por Le Normand -con una cláusula de 60 millones, contrato hasta 2026 y con su 'Sí' dado al Atleti-, los colchoneros no pasaban de 30 millones y los 'txuri-urdin' se mantenían en 40. Finalmente, el acuerdo se ha cerrado en un fijo de 34,5 millones de euros más cinco en variables, por lo que puede decirse que los blanquiazules se llevaron el gato al agua.
Con Mikel Merino deberán ceder un poco más, pero no demasiado. El centrocampista también tiene 60 kilos de cláusula de rescisión, pero sólo tiene un año más de contrato y sería agente libre en 2025. No obstante, su gran papel en la Eurocopa y el hecho de que el futbolista, hoy por hoy, no haya descartado aún una renovación (muy poco probable), hace que desde San Sebastián se mantengan firmes en una tasación aproximada de unos 30 millones y con la exigencia añadida de que gran parte del pago sea al contado.
El Atlético le tiene como una de las grandes peticiones de Simeone, pero acaba de fichar a Le Normand y está negociando por David Hancko y debe buscar delantero pues a Artem Dovbyk no le ha convencido el proyecto. Según avanzó hace unos días El Diario Vasco, a Merino tampoco le hizo mucho tilín lo que le contaron desde el Metropolitano. En el Barça tampoco están para mover ficha a corto plazo, pues la prioridad es Nico Williams y su fichaje supondría invertir más recursos de los que dispone a día de hoy. Las últimas informaciones apuntaban a que colchoneros y culés no llegan ni a 20 millones y que el Arsenal FC era el único dispuesto a satisfacer las demandas económicas de la Real Sociedad, pero a día de hoy sigue sin formular propuesta alguna a pesar de que el exrealista Mikel Arteta ya se ha puesto en contacto con Mikel Merino.
En este sentido, el periodista Fabrizio Romano apunta este domingo que, en contra de lo que afirmaban algunas informaciones británicas -eufóricas con el fichaje de Riccardo Calafiori y el acercamiento a Fabián Ruiz-, el Arsenal FC no está dispuesto a cometer locuras económicas pese a estar más que interesados en hacerse con los servicios de Mikel Merino y a pesar de que están a punto de embolsarse más de 40 millones por la venta de Emile Smith Rowe al Fulham FC. En la misma información, apunta a que a partir de esta próxima semana habrá conversaciones entre clubes para intentar cuadrar la demanda de uno con la posibilidad del otro sin que se espere desenlace inminente. De hecho, los contactos sólo han sido preliminares y la negociación está aún por empezar. Y el precio es la cuestión.