El presidente del Rayo Vallecano, Raúl Martín Presa, ha dibujado este miércoles el nuevo estadio del equipo madrileño y se ha mojado, tras la polémica social y la confrontación política desatadas a raiz de que la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, asegurase que el club franjirrojo no puede seguir en Vallecas porque la situación es "insostenible" y desvelase contactos con la directiva para buscar terrenos en los que construir un nuevo feudo. El máximo dirigente del club rayista ha asegurado que las arcas "no tiene capacidad para financiar una reforma" del actual feudo, "que además no tiene hacia donde crecer" urbanísticamente, pero sí ve posible reunir fondos para construir "un nuevo estadio que sea propio" intentando, sin prometer nada, que esté "lo más cerca posible del actual".
"El Estadio de Vallecas es entrañable, pero ya hace varios años que quedó obsoleto. Ahora tenemos cierto nivel de solvencia y es el momento de aspirar a crecer, y eso pasa por una serie de cuestiones que el estadio ahora mismo no nos las da. Su capacidad es reducida para la masa social que estamos llevando y en continuo crecimiento", analizó Presa en una entrevista a Onda Madrid en la que admitió que las actuales instalaciones son "incómodas" y tiene "malos accesos". "No tiene párking para jugadores ni autoridades, no tenemos zona de almacenamiento, no hay zonas adecuadas de trabajo para prensa, sin zonas de 'hospitality' ni zonas VIP... Todo eso afecta sensiblemente en la obtención de ingresos, siendo al final el equipo que menos ingresos puede obtener en LaLiga", lamentó, justificando su deseo de buscar una nueve sede.
De este modo, Presa rechazó emprender obras de remodelación del estadio actual, algo que considera "muy difícil". "Si se hiciesen una serie de cuestiones urbanísticas que afectan a todos los vecinos del barrio, sería posible, pero también sería muy caro. El Rayo no tiene capacidad para financiar una reforma, quizás si un estadio. Es que el campo, en un fondo, no tiene hacia dónde crecer", dijo el presidente rayista, quien fue preguntado por la polémica sobre la posible marcha del barrio de Vallecas que ha desatado quejas entre las asociaciones de aficionados y confrontación entre los principales partidos políticos con representación en las instituciones madrileñas.
"El nuevo estadio estaría lo más próximo posible al estadio actual. Si puede ser dos calles abajo mejor que seis, si puede ser seis mejor que ocho. Pero necesitamos un terreno, un terreno dotacional para el uso deportivo, que no son 100 metros cuadrados lógicamente", agregó Martín Presa. "El Rayo lo que quiere es tener, y además eso lo lleva transmitiendo 10 años, un estadio propio. Queremos llegar a un acuerdo para adquirir unos terrenos y poder construir un estadio. Toda ayuda tanto de nuestra comunidad y de nuestro ayuntamiento la vamos a agradecer mucho, porque un estadio y un equipo de fútbol es patrimonio del municipio y de la región y se sienten beneficiados, del turismo que atrae, del reclamo como visita turística", añadió.
Sin dar datos concretos sobre zona o aforo, el presidente del Rayo Vallecano calculó que el nuevo feudo necesitará albergar "10.000 localidades más como mínimo", con un proyecto que le permita "crecer conforme va creciendo el club". "Hay que hacerlo buscando eficiencia de costes e inversión, pero con facilidad para crecer. Un estadio más cómodo, más accesible, moderno, para ponernos a la vanguardia", concluyó, antes de ser preguntado por esas estrecheces que, entre otras cosas, provocaron la polémica de estos días tras la agresión sufrida por el jugador del Sevilla FC Lucas Ocampos por parte de un joven hincha local cuando se disponía a sacar de banda en el partido del pasado lunes. Martín Presa confía en que no haya cierre del estadio.