Fernando Mateos4 min lecturaCon el cabreo que ha causado la derrota por la mínima ante el Atlético de Madrid, que se llevó la victoria del Nuevo Los Cármenes merced a un polémico gol de Morata, el Granada enfila la recta final de mercado convencido de que aún puede rematar su revolución invernal tras “cubrir las necesidades” que tenía el equipo en defensa, tal y como aseguró su director deportivo, Matteo Tognozzi, en los instantes previos al duelo frente a los colchoneros.
Tras cerrar las incorporaciones del meta Augusto Batalla, los centrales Bruno Méndez y Piatkowski y el mediocentro Martin Hongla, así como el regreso del delantero Matías Arezo, en la órbita del New York City, el conjunto nazarí tiene ahora como prioridad la contratación de, al menos, un extremo.
En este sentido, todas las miradas apuntan a Facundo Pellistri. El acuerdo con el joven futbolista uruguayo, que ya pasó por el Alavés, parecía cerrado hace días, pero desde Inglaterra anuncian que las negociaciones que iban por buen camino se han estancado en las últimas horas.
El deseo del internacional charrúa de 22 años es el de volver a LaLiga EA Sports, dadas las escasas oportunidades de las que viene gozando en el Manchester United, donde ha participado en 14 partidos entre todas las competiciones, si bien sólo tres de ellos como titular. Pero es el acuerdo entre clubes el que no acaba de llegar.
Según informa Daily Mail, la intención del Granada es pagar una parte poco más que “simbólica” de su salario, y ahí es donde reside el problema, pues los ‘reds devils’ le piden un mayor esfuerzo para dar luz verde a la operación. No significa que las conversaciones se han dado por rotas, pero sí se apunta que hay otros clubes interesados y lo que parecía un fichaje cerrado pende ahora de un hilo.
Al respecto, Tognozzi no ha descartado su llegada, pero quiso ser muy prudente al respecto. “Hay muchos nombres y seguramente sus características de extremo rápido pueden ser las que nos falten, pero ahora viene una semana de ocasiones y veremos lo que surge”, explicó.
Además, para que puedan llegar nuevos refuerzos deben producirse unas salidas que de momento se encuentran atascadas. En el caso de Manafá, sigue sin cerrarse un acuerdo con el Botafogo, mientras de Famara Diédhiou apenas hay noticias y el elevado sueldo de Weismann supone un impedimento para clubes como el Burgos o el Elche.
“Ahora hay que ver lo que podemos mejorar en estos últimos días de mercado. Hicimos bastantes cosas atrás pero tenemos varios jugadores de ataque en la línea de salida y veremos si los podemos reemplazar. Estaremos atentos porque ahora es cuando más jugadores se moverán”, sentenció al respecto el director deportivo de los nazaríes.