Se confirman las malas noticias para Bryan Gil. Ya lo desvelaba su técnico, Míchel, tras el partido ante el Valencia donde Stuani celebraba su gol mostrando la camiseta del extremo del Girona y las pruebas a las que ha sido sometido el de Barbate han confirmado que sufre una lesión importante que puede acabar con su temporada.
Todo dependerá de la decisión del futbolista, según apunta el periodista de Radio Girona Esports Nilo Solà, que ahora debe pensar si decide operarse o intentar un tratamiento conservador tras confirmarse que sufre una afectación en el ligamento lateral de su rodilla derecha así como en el menisco. En principio parecía un esguince pero se temía que hubiera más daño e incluso el ligamento estuviera roto, aunque la lesión es más grave de lo que se temía en un principio.
El extremo izquierdo fue sometido ayer domingo a nuevas pruebas médicas que han detectado que el futbolista sufre una afectación en el menisco y en el ligamento lateral, por lo que ahora deberá decidir si pasa por el quirófano o no. Esta lesión le obligará a perderse lo que resta de temporada, siendo sin duda una importantísima baja para Míchel pues el barbateño era uno de los hombres más utilizados y había firmado esta temporada un total de cuatro goles y tres asistencias.
Así las cosas, Bryan Gil dirá adiós antes de tiempo al Girona, aunque todavía está por ver qué decide el conjunto catalán con respecto a su opción de compra. Cabe recordar que el Tottenham le fijó un precio de 15 millones de euros que da prioridad al Girona, aunque la decisión no está clara todavía en la dirección deportiva. El futbolista gaditano afronta este verano su último año de contrato con los 'Spurs', por lo que podría acabar saliendo de Londres por un precio inferior aunque esto también implicaría el tener que lidiar con más competencia al salir de nuevo al mercado de verano.
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La de Iván Martín era la otra baja que preocupaba en el Girona después de que el centrocampista cayera lesionado el pasado viernes frente al Valencia. Tras las pruebas médicas a las que ha sido sometido, se ha confirmado que el vasco sufre una rotura en el isquiotibial, por lo que estará alejado de los terreno de juego entre cuatro y seis semanas, otra baja importante para Míchel y que no recuperará hasta casi el último mes de LaLiga.