Fernando Ruiz3 min lecturaSergio Reguilón espera la apertura del mercado de enero como agua de mayo. El futbolista madrileño ha vivido estos meses una auténtica pesadilla en Londres, donde ha entrenado día a día con sus compañeros en el Tottenham pero donde nunca ha tenido oportunidades para jugar. Bueno, nunca no, porque jugar ha jugado un minuto tan sólo, en la Copa Inglesa frente al Manchester United. Hasta el propio futbolista se lo tomó con buen humor posteando en Instagram unas fotos del partido con una sarcástica frase: "Mira mamá, ayer jugué un partido de fútbol".
Al mal tiempo buena cara pensará Sergio Reguilón, porque lo cierto y verdad es que no le queda otra actitud que esa, la de seguir trabajando, con una sonrisa, a la espera de poder salir este mes de enero para volver a sentirse futbolista. Pese a que no contaba para Ange Postecoglu, se quedó el pasado verano en Londres, y su situación, lejos de cambiar se ha agravado. Apenas ha entrado en siete convocatorias del técnico griego. Por suerte para el español, apenas le quedan seis meses de contrato, por lo que su salida parece cantada en este mes de enero pues será la última oportunidad de que el Tottenham ingrese algo por un futbolista por el que llegó a pagar 30 millones de euros después de su gran temporada cedido en el Sevilla Fútbol Club por el Real Madrid.
Precisamente el pasado verano, con la salida de Marcos Acuña, el lateral izquierdo volvió a sonar con fuerza para regresar al Sevilla, pero finalmente el club de Nervión apostó por Valentín Barco, un préstamo que ahora interrumpirá y por la que habrá una nueva vacante en el lateral izquierdo para competir con Adrià Pedrosa. El jugador vería con buenos ojos regresar a LaLiga, donde dio su mejor versión pese a que en su cesión al Atlético no pudo demostrarlo por las lesiones. Ahora el Getafe también ha mostrado interés en hacerse con sus servicios.
En el Tottenham tan sólo ha conseguido jugar 68 partidos desde que firmará allá por 2020, tras dos temporadas comenzó a encadenar una cesión tras otra a Atlético de Madrid, Manchester United y Brentford, por lo que ahora pretende de nuevo volver al escaparate en el mercado de enero. Sabe que el Tottenham no puede exigir mucho tras haberlo tenido en el ostracismo y a poco más de medio año de ser libre para decidir su futuro, por lo que su salida parece cantada. A sus 28 años, quiere volver a empezar y dejar atrás la pesadilla de Londres.