Manuel Pedrero4 min lecturaDavid De Gea volvió a jugar un partido oficial 446 días después. El portero español cerraba su periplo en el olvido fichando a comienzos de agosto por la Fiorentina. El conjunto viola lograba convencer al futbolista y tras 12 años en el Manchester United le llega la oportunidad de seguir demostrando que puede jugar en la élite. El curso pasado lo pasó en casa. Año sabático donde se especuló mucho sobre su futuro. Espantado los rumores sobre una posible retirada, el meta jugó ayer su primer partido con la escuadra italiana y las cosas no fueron del todo bien.
La Fiore afrontaba en casa la ida del playoff previo a la entrada en la fase final de la Conference League. Los violas se medían al modesto Puskas Academy, rival húngaro más rodado y se notó. Son líderes de su liga, con 12 puntos y pleno en los cuatro partidos que se llevan disputados. Palladino decidió darle la titularidad al español después de que en Liga, las llaves de la portería siguen estando en manos de Terracciano. El partido finalizó en empate (3-3) y los italianos tendrán que jugarse el pase de ronda la semana que viene a domicilio.
Más de un año sin competir se notó para De Gea. Pese a jugar con un rival teóricamente inferior, el Puskas Academy salió arrollador y en 12 minutos ya ganaba 0-2. Nagy transformaba un penalti en el nueve y sólo tres más tarde Soisalo, con un buen golpeo desde fuera del área, ampliaba diferencias.
La Fiorentina reaccionó e incluso llegó a voltear el marcador de manera provisional. Sottil haría el 1-2 antes del descanso y ya en la segunda mitad Martínez Quarta y Moise Kean ponían en ventaja a los de Palladino. Pero cuando todo hacía presagiar que la victoria se quedaba en el Artemio Franchi, Golla amargó la fiesta con un tanto a la entrada del descuento.
David De Gea no tuvo grandes intervenciones de mérito pero no se vio protagonista indeseado de los tres tantos. Se le vio inseguro, sobre todo a la hora de salir por el balón en jugadas aéreas y no transmitió sensaciones positivas. Pese a todo, el entrenador toscano no quiso personalizar en él y achacó el empate a falta de ritmo de determinados jugadores: "Obviamente, tenemos un equipo que está en progreso, muchos jugadores han llegado en diferentes momentos de la pretemporada, por lo que no hemos tenido mucho tiempo para trabajar todos juntos. El rival está en una fase más avanzada de su preparación de esta temporada, pero eso no debe ser una excusa, sino una motivación para hacerlo mejor", precisó.Un debut que ya ha levantado voces críticas entre los seguidores de la Fiorentina. No entrar en la fase final de la Conference League sería un fracaso. Una competición que no guarda buenos recuerdos para el club. Perdieron dos finales, la última esta pasada campaña frente a Olympiacos. De Gea volverá a ser titular la semana que viene en el encuentro de vuelta con el intención de actuar mejor y asegurar el pase.
