Jugar en LaLiga española y en un club como el Sevilla FC era uno de los objetivos de Giovanni Simeone el pasado verano. Sin embargo, las peculiaridades de la última ventana de fichajes en España, marcada por la precariedad económica, y la situación de los nervionenses, obligados a cuadrar sus cuentas, acabaron imposibilitando que el delantero acabara arribando a Nervión, siendo uno de los nombres que Monchi tenía sobre la mesa.
El Hellas Verona venía solicitando unos 20 millones de euros y, aunque tanto él como su agente estaban por la labor de forzar para abaratar ligeramente la operación, el monte total seguía siendo excesivo para un Sevilla FC que apuntaba a otros sitios y que sólo contemplaría una operación así para la delantera si antes salía alguno de sus artilleros, como nunca acabó ocurriendo. De ahí que, a la postre, el ‘Cholito’ Simeone acabara en el Nápoles a cambio de unos 17 millones de euros y el Sevilla FC acabara reforzando su vanguardia el último día de mercado con la cesión de Kasper Dolberg, cuya opción de compra tampoco era obligatoria.
Por ahora, a Gio Simeone le va bastante mejor que a los de Nervión, que han tenido que cambiar de entrenador para intentar salir Del Pozo de la mano de Sampaoli como recambio de Lopetegui. Con el conjunto italiano, el atacante argentino suma cuatro tantos en nueve partidos; dos de sus dianas en Champions, ante Liverpool y Ajax. Un rendimiento que ha servido para enamorar a propios y ajenos. Entre ellos, a su propio entrenador, Spalletti, quien lo viene utilizando como revulsivo: “Gio Simeone es un espectáculo”.
Ahora, el ‘Cholito’ Simeone, en una entrevista al diario La Nación, explica por qué se decantó por el Nápoles y, en cierta manera, no por el Sevilla FC. Una operación que, como ya hemos explicado, estuvo siempre condicionada por lo económico.
“Sentía que quería venir…, lo sentía. Más allá de su grandeza, de lo competitivo que es el club, hubo algo en mi interior que me indicó que era Napoli. Tenía que venir para acá. No lo puedo explicar mejor, tal vez, porque soy sensible a atender esos llamados interiores. El destino me decía que tenía que venir para Napoli. La negociación en algún momento se trabo, y sin embargo jamás me moví un centímetro de mi deseo: quería estar acá. Jamás me sentí como acá, en Nápoles. Porque son como entre italianos y argentinos, así como yo, como yo me siento”, explicó Gio Simeone a La Nación, donde reconoce también que lucha por estar en el Mundial de Qatar, algo que, en cualquier caso, ve complicado.
“Yo me creo todo el tiempo la ilusión de la selección, yo no abandono el sueño de estar en la lista mundialista…, pero hay muchos jugadores buenos, la selección está bien y el grupo está fuerte, entonces es difícil entrar en un lugar donde todo marcha bien. Yo lo único que debo hacer es estar listo para poder ofrecer mi granito de arena en cualquier aspecto que necesite la selección. Por eso voy a estar siempre preparado y nunca me desmotivo. Las chances las tengo, y las voy a tener siempre: cada domingo cuento con la posibilidad de demostrarle a Scaloni que quiero estar. Jamás me voy a desmotivar”, explica el Cholito.