La llegada de Montse Tomé al banquillo de la selección española femenina no fue el que ella hubiera esperado. Una alegría como esa fue empañada por el momento y las formas, viéndose obligada a coger las riendas en un momento muy convulso en el seno de la RFEF. Con el presidente de la Federación, Luis Rubiales, suspendido por su beso a Jenni Hermoso, y con el seleccionador Jorge Vilda destituido tras haber sido renovado por ganar un Mundial.
Tomé, que era su segunda, no fue bien acogida de inicio por las internacionales, que solicitaban romper del todo con lo establecido. Tras unos días de conflictos y encontronazos, sin embargo, las aguas se apaciguaron y las profesionales supieron reconducir la situación y ganar la Nations League al tiempo que se clasificaban para los Juegos Olímpicos de París.
Ahora, Montse Tomé se ha convertido en profeta en su tierra, siendo nombrada ‘Asturiano del mes’ por el diario de La Nueva España; una distinción que recibió “orgullosa” y cuyo acto aprovechó para tratar ciertas cuestiones, como su desembarco en el banquillo de la selección femenina de fútbol como seleccionadora absoluta, tras años a la sombra de Vilda.
“Entramos en un momento complejo y lo que nos hizo salir adelante fue centrarnos en el fútbol, tanto el staff como las jugadoras, que son las que ejecutan los planes”, rememora Tomé, quien explica cuál ha sido la clave para hacer olvidar todo lo ocurrido meses atrás: “Que esos planes salieran adelante y pudiéramos ganar los partidos ha hecho que generásemos un clima del que disfrutamos, profesional, positivo, donde todas podamos aprender, crecer y expresarnos, siempre poniendo por encima el equipo, que es el equipo de todos, España”. Unas palabras, las de la seleccionadora española, que si se leen entre líneas dicen mucho más de lo que aparentan, dejando más de un recado a figuras del pasado, como el propio Rubiales o Jorge Vilda, al que las futbolistas tacharon de tener un forro control personal sobre sus futbolistas, más allá de lo meramente deportivo.
También explicó Tomé cómo ha cambiado todo en la selección desde su su etapa de futbolista, en la que también fue internacional con la absoluta, hasta nuestros días, en la que lo está viviendo en primera persona como seleccionadora: "Hemos ido mejorando en todo, en recursos humanos, en recursos materiales, eso ha hecho que la futbolista esté mejor preparada que antes, todo ha evolucionado en nuestro entorno, ahora las futbolistas tienen otras condiciones, esto ha hecho que cuando juegas contra selecciones top puedas ser competitivo, y hemos conseguido llegar a ganar un Mundial, que eso antes era muy complicado. Ahora, después de este verano, hemos logrado ser competitivas en una nueva competición, la Liga de las Naciones, y clasificarnos para los Juegos, que eso antes tampoco pasaba".