Quique Setién hizo las maletas en diciembre para enrolarse en el proyecto más exótico de su carrera como entrenador. Fichó por el Beijing Guoan de la Primera división con el reto de acercar distancias con los dos principales rivales: el Shanghai Shenhua y el Shanghai Port. Ganó el primer partido con solvencia ante el Yunnan Yukun (0-2) y rascó un meritorio empate (2-2) frente al Shenhua. El técnico cántabro toma la palabra para explicar sus sensaciones en estos primeros meses en Asia. Espera lograr grandes objetivos en Pekín y valora el hándicap que supone el idioma.
Setién vive una etapa novedosa como entrenador. Por primera vez en su carrera dirige a un equipo extranjero. Siempre había desarrollado su trabajo en España: Racing de Santander, Logroñés, Lugo, Las Palmas, Real Betis, FC Barcelona y Villarreal. Ahora en China quiere demostrar que su nivel sigue intacto y pelear por ganar la liga del país.
El técnico cántabro reconoce que le ha sorprendido positivamente la plantilla: "De momento estoy más contento de lo que esperaba. Hay una predisposición extraordinaria al trabajo. Los jugadores son tremendamente receptivos. Cada vez que hablas con ellos te prestan una atención máxima. Además son muy listos porque son capaces de llevarlo a cabo. Es verdad que algunas cosas del juego no las interpretan todavía bien pero hay que entender que este país lleva 40 años jugando al fútbol. No hay base en la que puedan empezar desde pequeños", detalla en una entrevista concedida a RNE.
Su estilo de juego por el buen trato a la pelota es innegociable. Ya dejó muestras de ello en la primera jornada del campeonato con una jugada de posesión y poses hasta llegar a la portería rival. El entrenador español explica cómo logra trasladar su idea al grupo: "El fútbol es internacional pero yo me apoyo mucho en las imágenes para transmitir las cosas. Pequeños detalles al lado de la imagen y con el traductor al lado consiguen entender bien. No tienen una comprensión asociativa del juego. Los chinos son muy buenos en deportes individuales pero les cuesta relacionarse. Tienen que entender que el fútbol es un juego asociativo y para estar arriba tenemos que actuar en bloque".
Preguntado por el tema del idioma, bromeaba: "Hay otra barrera importante que es la del idioma, pero tenemos un traductor que es un fenómeno. Ya le estoy enseñando a entender la ironía, seguro que nos va a ir bien", dijo entre risas.
Acerca del Beijing Guoan, comentó: "Mi equipo es el equipo de los trabajadores y el más importante del país. Sólo estamos nosotros como equipo en una ciudad de 30 millones de habitantes como Pekín. Me tengo que enterar del porqué. Me llama mucho la atención. Tiene un estadio para 60.000 personas que se llena. Tiene una afición que anima permanentemente. Nunca ha ganado prácticamente nada desde que se creó la liga. Los equipos de Shanghai son los más potentes y el año pasado le sacaron mucha diferencia en puntos. Este año a ver si acortamos esa distancia e incluso a ver si le podemos superar. Es un reto importante pero tenemos muy buenos jugadores y una predisposición muy buena", aseveró.
Por último destacó el buen concepto que tienen en China de los entrenadores españoles: "Ellos tienen una experiencia con entrenadores europeos y hay un bagaje importante. Les ha ayudado a mejorar sus prestaciones y entender mejor las cosas. Somos muchos españoles entrenando en China. Tenemos muy buena fama en el mundo". Cabe recordar que antes de Quique Setién el Beijing Guoan tuvo a Gregorio Manzano y José González en el club.