Actualmente la portería del Celta de Vigo está bien cubierta. Vicente Guaita se ha ganado por completo a la afición gallega, pero también la confianza de Claudio Giráldez. El experimentado meta español ha jugado 24 de los 28 partidos que lleva los vigueses esta temporada. Tan solo ha faltado en esos 4 partidos en favor de Iván Villar, que sin embargo no ha tenido muy buen rendimiento recibiendo 9 goles en las ocasiones que ha tenido. Es por eso que Guaita se ha asentado en la portería, y ha hecho olvidar a Rubén Blanco, que sobresalió especialmente en la temporada 20-21.
Rubén Blanco era un “hombre de la casa” en Vigo. El guardameta pasó por muchas de las categorías inferiores de los celestes. El primer salto lo dio siendo bastante joven, con tan solo 19 años pasó del juvenil al filial del conjunto gallego. Y dos años después, ya consolidado en la meta del Celta Fortuna, entonces solo era conocido como Celta B, da el paso al primer equipo, en 2014. Durante esa primera temporada solo tuvo una oportunidad con Berizzo en los banquillos. Durante varias temporadas, a pesar de su buen desempeño y de venir de la cantera, no consiguió asentarse en el primer equipo, sobre todo por el gran nivel de Sergio Álvarez, que entonces era titular.
Su primera gran temporada llegó con Unzué a las órdenes del equipo, en la campaña 2017-18. Aunque no fue un titular indiscutible, Blanco jugó 22 encuentros donde recibió 31 goles, mientras que Sergio Álvarez por lesiones jugó 17. Su primera temporada como portero titular fue un año duro, en la 2019-20 donde el club estuvo cerca de caer a la categoría de plata. Blanco jugó 33 encuentros, y el Celta se acabó salvando por tan solo un punto de diferencia con 37, frente a los 36 del Leganés. Su mejor nivel llegó en la siguiente temporada, donde el club gallego estuvo a tan solo 5 puntos de entrar en Europa con Rubén Blanco como una de las estrellas del equipo a pesar de jugar solo 19 partidos.
En ese momento llamó la atención de algunos equipos a nivel internacional, sin embargo se acabó quedando en Vigo, donde no disputó ni un minuto. Con Coudet en el banquillo, Dituro fue el titular indiscutible jugando los 38 encuentros. Este paso atrás en su progresión, ya con edad de tratar de consolidarse, provocó su adió a la que hasta entonces era su casa. El Olympique de Marsella fue el club que le permitió dar el salto en forma de cesión. En Francia sin embargo tampoco ha sido capaz de ganarse la titularidad. La lucha con grandes metas como Pau López no le han permitido tener continuidad. A pesar de eso el club lo compró después de su primer año de cesión sumando un total de unos 4 millones en la operación.
La primera temporada fue la única donde jugó algo más con 6 partidos, donde recibió 6 goles. Y entre las dos siguientes temporadas, donde se cuenta la actual, el guardameta gallego tan solo suma dos participaciones. Este año es otro conocido de La Liga como Gerónimo Rulli quien ocupa con mano de hierro la portería marsellesa mientras que Rubén Blanco, ya con 29 años, no ha conseguido establecerse en ninguna portería de manera segura.