Iago Aspas no es el único incendio que Rafa Benítez tiene vivo en el vestuario del Celta

Carles Pérez, por el que los celestes abonaron 5'2 millones de euros a la Roma en verano, suma cuatro jornadas sin entrar en los planes del madrileño; su relación no es la mejor, siendo el trabajo del futbolista con un entrenador personal el detonante de las diferencias: en el staff no convencen los métodos utilizados

Iago Aspas no es el único incendio que Rafa Benítez tiene vivo en el vestuario del Celta
Rafa Benítez, técnico del Celta. - Cordon Press
Alejandro SáezAlejandro Sáez 4 min lectura

La titularidad, o no, de Iago Aspas ante el Getafe CF en el Coliseum no es el único lío que Rafa Benítez tiene montado en el Celta de Vigo. Mientras que los números no acompañan al técnico madrileño esta temporada, la del centenario del club, sus decisiones chocan, también, con los intereses del club en ciertos aspectos. Uno de ellos, la afición, que a la hora de tensarse la cuerda siempre estará del lado de su capitán e ídolo, un Iago Aspas que, de repetir banquillazo, empujará aún más a Benitez.

Pero hay mucha más tela que cortar en el seno del vestuario celeste. Sin ir más lejos, el problema con Carles Pérez, cuya relación con Benítez tampoco es, precisamente, la mejor. De hecho, este pasado mercado de enero estuvo en la rampa de salida, aunque finalmente tan sólo fue el meta Agustín Marchesín el único que acabó abandonando Balaídos en una ventana invernal en la que llegaron el mediocentro brasileño Jailson, el lateral diestro Javier Manquillo y el extremo argentino Tadeo Allende.

Con el cierre del mercado sobre la bocina, el Celta se lanzó a cerrar un acuerdo en préstamo con el Getafe que no acabó fuctificando. Como ya había pasado anteriormente con el Mallorca, las partes no llegaron al entendimiento en lo económico, solicitando el Celta el pago íntegro de la parte proporcional del -elevado- salario de Carles Pérez así como un porcentaje de la amortización de su fichaje. Es decir, que Carles Pérez acabó quedándose en Vigo al menos hasta final de temporada, cuando a buen seguro se le buscará una salida. Especialmente si continúa Benítez, quien firmó por tres temporadas a razón de cinco kilos y al que, por el momento, los dudosos resultados cosechados no le han movido la silla.

El pasado verano, el Celta abonó 5'2 millones de euros a la Roma por el fichaje de un Carles Pérez que en el curso anterior, como cedido, se acabó asentando en el tramo final, resultando clave para la salción del equipo celeste con tres goles y cinco asistencias que hicieron olvidar las irregularidades iniciales. Este curso, sin embargo, su papel es totalmente testimonial, no contando para un Rafa Benítez que apenas le ha brindado 439' en LaLiga a lo largo de nueve partidos. Es decir, que algo pasa entre Carles Pérez y Rafa Benítez. Ante Osasuna volvió a quedarse fuera de la convocatoria, acumulando ya cuatro jornadas consecutivas sin participar. Una decisión que el propio Benítez se encargó de aclarar que era puramente técnica y que no era por lesión.

El problema Rafa Benítez con Carles Pérez

Según publica el compañero Clemente Garrido en el diario As, los problemas entre el técnico del Celta y Carles Pérez van más allá del propio rendimiento. Entre lesiones y nivel ofrecido sobre el campo no ha acabado nunca de ganarse la confianza de Rafa Benítez, cierto; pero habría algo más. Según dichas informaciones, en la entidad no estarían del todo contentos con los métodos del futbolista, quien tiene un entrenador personal cuyos hábitos no acaban de casar con los del cuerpo técnico del primer conjunto celeste. A la hora de entrenar tampoco lo estaría dando todo, por lo que ante los ojos de Benítez es el último recurso dentro del vestuario. Un grave problema, por tanto, para un RC Celta que tendrá que acabar de darle solución el próximo verano, una vez que la confianza por parte de Benítez esté demostrada que no existe.