El gafe que el Celta busca romper

El conjunto celeste lleva 21 años sin conseguir la victoria en el estadio de Son Moix

El gafe que el Celta busca romper
Iago Aspas en el Santiago Bernabéu durante esta temporada - Cordon Press
Elena GuerraElena Guerra 3 min lectura

Este sábado a las seis y media, el Celta de Vigo regresa a un estadio que no le ha traído alegrías desde 2004, año en el que logró su última victoria en Son Moix. Este partido es crucial para el equipo dirigido por Claudio Giráldez, ya que ganar a un rival directo en la lucha por los puestos europeos les daría un impulso vital para seguir soñando con Europa la próxima temporada. No se clasifica para esa competición desde la temporada 2016-2017, cuando alcanzaron las semifinales de la Europa League, cayendo ante el Manchester United por un global de 2-1.

Históricamente, el Celta ha tenido dificultades cada vez que visita Mallorca. En las últimas dos décadas, ha disputado solo ocho partidos en Primera División en Son Moix, con un balance de una victoria, tres empates y cuatro derrotas. La última victoria fue en la temporada 2003-2004, cuando el equipo, dirigido por Lotina, se impuso a los bermellones por 2-4 en un emocionante final. Desde entonces, cada visita ha sido un gafe que el Celta espera romper esta temporada.

Tras este decisivo duelo, los pupilos de Giráldez se verán las caras con el Espanyol, que lucha por la salvación, lo que se prevé como un encuentro muy complicado para los celestes. Después de este partido, el Celta enfrentará dos desafíos aún mayores: visitará al FC Barcelona y recibirá en casa al Villarreal. Por lo tanto, la obligación de conseguir los tres puntos este sábado en Son Moix es vital.

Iago Aspas y su rol en el equipo

Si hay un jugador clave para el Celta, ese es su capitán, Iago Aspas. El de Moaña ha disputado 22 partidos en LaLiga EA Sports esta temporada, aunque no ha sido titular para Claudio Giráldez. Después de una lesión a mitad de curso, volvió a la acción marcando un gol de penalti en el empate 1-1 contra el Atlético de Madrid el pasado 15 de febrero. Desde entonces, a pesar de estar completamente recuperado, ha visto cómo sus minutos en el banquillo aumentan. Sin embargo, Iago sabe que su papel va más allá de ser titular; cada vez que entra al campo, demuestra que solo necesita 20 minutos para convertirse en el revulsivo del equipo. Además, cuenta con la tranquilidad de tener un contrato vigente hasta al menos junio de 2026, firmado el pasado mes de diciembre. Iago ya tiene claro cuál es su papel en el equipo.