Fernando Mateos4 min lecturaSe repite la historia en el Cádiz. Si el pasado año fue el Real Unión de Irún el que lo dejó fuera de la Copa del Rey a las primeras de cambio, este jueves ha sido la modesta Arandina, de Segunda RFEF, la que ha mandando a la calle al conjunto amarillo en la segunda eliminatoria.
El cuadro amarillo llegó a igualar el partido pasada la media hora por medio de Fede San Emeterio, pero acabó perdiendo 2-1. Tras el partido, su técnico, Sergio González, compareció ante los medios y protagonizó una rajada con un claro mensaje sobre las decisiones que se toman desde las altas esferas. Y es que, en su opinión, las mismas no tienen el mismo rasero cuando son equipos más poderosos los que se encuentran con una situación como la que vivió su equipo, con un césped lleno de charcos en el que difícilmente rodaba el balón.
“Lo primero de todo es felicitar a la Arandina, que ha competido de una manera excepcional y se ha adaptado, aunque me duela decirlo, mejor que nosotros a las condiciones que había. Pedirle perdón a la afición del Cádiz, a los que han venido y los que se han quedado en casa, siento vergüenza ahora mismo. Les pido disculpas y ojalá el domingo podamos recompensarle con una victoria”, comenzaba afirmando el técnico catalán, que no quiso poner paños calientes a la derrota.
Pero acto seguido, Sergio no pudo esconder su enfado por el estado del terreno de juego. “La verdad es que el campo no estaba para jugar al futbol, pero no quiero que sea el titular. Insisto en darle la enhorabuena al Arandina, que ha marcado dos goles a balón parado donde ahí el campo no estaba por medio, pero estaba impracticable y no estaba en condiciones para jugar”, explicó.
Ahondando en este asunto, sin embargo, el preparador del conjunto cadista señaló al colegiado Hernández Maeso. “El colegiado lo ha comprobado y ha dicho que estaba para jugar bajo nuestra sorpresa. Conmigo no ha hablado", señaló, dejando caer luego que “si viene otro equipo, aquí no se juega”. “Se ha jugado porque somos nosotros”, puntualizó, aludiendo de ese modo a la discutible decisión del árbitro.
"De fútbol hoy se puede hablar muy poco. Hemos empezado el partido tarde entre la cesión y el gol de ellos. A partir de eso, hemos competido, pero no hemos podido. La Arandina ha estado más efectiva a balón parado. A pesar de ello, teníamos que haber ganado. Frustrado y dolido por la afición. Nos vamos muy jodidos porque hemos defraudado a mucha gente", sentenció con respecto al pobre partido de su equipo, más allá del estado del terreno de juego.