La vía preferida por John Textor para salvar al Lyon... y la del Betis

La amenaza de descenso del histórico club francés obliga a su dueño estadounidense a tomar medidas, algunas de las cuales frustrarían la llegada de dos millones de euros más a La Palmera

La vía preferida por John Textor para salvar al Lyon... y la del Betis
El de Petrópolis es un auténtico ídolo en Río de Janeiro. - @botafogo
Óscar MurilloÓscar Murillo 5 min lectura

A punto de asegurarse dos millones de euros de los cuatro en variables que incluía el traspaso de Luiz Henrique el pasado mes de febrero, más los 16 millones fijos en que se cerró la operación, los que quedan están seriamente en peligro. La primera partida extra, como ya se ha dado a conocer, depende de la participación del de Petrópolis al menos en el 60% de los partidos de su equipo, superando ampliamente este rendimiento el extremo, fijo en las filas 'alvinegras' (once goles y cinco asistencias en 49 partidos oficiales), lo que le ha catapultado a la selección absoluta de Brasil. De hecho, con 3.418 minutos, el zurdo está a punto de rebasar los 3.457 que jugó en año y medio como futbolista del Real Betis. Por un lado, para lamentar, quizás, la falta de paciencia en Heliópolis, donde se temió que la reaparición del fantasma del acoso judicial por su presunta participación en una trama de apuestas ilegales se cargara su cotización.

En realidad, los líos extradeportivos de Luiz Henrique no han terminado, ni mucho menos, aunque el momento deportivo que vive es estelar. También del propio Botafogo, que está a seis compromisos de ganar dos títulos, el más importante de su centenaria historia (fue fundado en 1904) y el tercero de la Série A casi treinta años después. Así, la entidad afincada en el Olímpico Nilton Santos no celebra nada desde los dos campeonatos de la Série B (Segunda división) en 2015 y 2021. Fue campeón nacional en la 67/68 y la 94/95, apuntándose una Copa Conmebol, un antecedente de la Copa Sudamericana que era más parecido a la europea Conference League, en la 92/93. Y pare usted de contar. El próximo sábado 30 de noviembre, se medirá con el Atlético Mineiro en el Monumental de River Plate por su primera Copa Libertadores. Y le quedan cinco jornadas para llevarse el Brasileirao (tiene cuatro puntos de ventaja sobre el Palmeiras y cinco sobre el Fortaleza).

Si gana uno o ambos entorchados, será complicado que se cumpla el augurio de 'GloboEsporte', que apunta a la venta de sus principales activos para salvar a un Olympique de Lyon también propiedad de John Textor del descenso. La necesidad de presentar, al menos, 100 millones de euros de los 500 en que se situaría su déficit obligará al empresario estadounidense a tomar medidas drásticas. Habla el citado medio ya de una oferta de 30 millones de libras (casi 36 de euros) por el delantero Igor Jesús, internacional brasileño de nuevo cuño de 23 años. Los siguientes serían Luiz Henrique y Thiago Almada, con propuestas del extranjero también. Una salida que no conviene al Real Betis, que sólo percibirá los dos millones de euros restantes de los bonus pactados si el de Petrópolis vuelve a Europa pero para vestir la camiseta del OL. Inviable si es vendido (no conservan los verdiblancos porcentaje alguno de su pase o de una hipotética plusvalía) o los del Groupama Stadium descienden

Sin embargo, Textor prefiere enjugar esa desfase en la Ligue 1 deshaciéndose del paquete accionarial que controla del Crystal Palace, que ronda del 45%. Unos empresarios locales y un fondo de inversión de Oriente Medio se habrían interesado ya por esa participación importante en la entidad londinense (en realidad, el también dueño del Botafogo ya había pensado apostar por el Everton, para lo que no podría poseer ningún control sobre otra entidad en Inglaterra). Esa venta, sin duda, serviría para solucionar los problemas económicos del Lyon sin tocar los grandes activos de que dispone en el Botafogo, donde lo 'matarían' casi literalmente sin desarma una plantilla que, como poco, ya habrá hecho historia. De esta manera, en la planta noble del Benito Villamarín seguirían conservando esperanzas de alargar las ganancias por su ex pupilo hasta los 20 millones de euros.