Óscar Murillo4 min lecturaLa dolorosa derrota del jueves en Mladá Boleslav ante un equipo prácticamente desconocido y en la zona de descenso de la Liga checa, unida al fiasco del sábado anterior en Mestalla frente a un Valencia CF que llevaba prácticamente un mes sin competir, ha despertado una fuerte autocrítica en el vestuario del Real Betis. Tanto su entrenador, Manuel Pellegrini, como un 'peso pesado' de la plantilla, Adrián San Miguel, analizaban sin paños calientes el bache por el que atraviesa el equipo y, en el caso del meta de Su Eminencia, el bochorno que sintió por el 2-1 en el Lokotrans Arena, señalando la obligación de cambiar el chip rápidamente ante el complicado calendario que espera hasta el parón navideño: Real Sociedad, UE Sant Andreu (en Copa del Rey a partido único), FC Barcelona, Petrocub Hincesti, Villarreal CF, HJK Helsinki y Rayo Vallecano.
Para colmo de males, no se espera de momento a los lesionados Héctor Bellerín, Pablo Fornals, Johnny Cardoso, Marc Roca, Nobel Mendy, Isco Alarcón y William Carvalho (en orden ascendente según el periodo de convalecencia restante), mientras que queda más de un mes para que se reabra una ventana invernal de transferencias a la que los verdiblancos acudirán con las manos aún más atadas. Porque, como ya advertía el CEO de la entidad, Ramón Alarcón, tras el desayuno informativo con los medios en el que se analizaron las cuentas que se expondrán en la junta general de accionistas del próximo martes 17 de diciembre, que la responsabilidad presupuestaria impedirá excesos en enero, por mucho que la venta extemporánea de Rodri Sánchez al Al-Arabia qatarí ratificara el superávit y la permanencia en la regla 1:1, con lo que todo lo recaudado y ahorrado se podría reinvertir en fichajes.
Las muchas e importantes lesiones que ha sufrido el Real Betis restan opciones de que se pueda hacer hueco con alguna salida a mitad de curso, por aquello de que el 'Ingeniero' pueda tener efectivos para una rotación puramente numérica, por lo que solamente habría una ficha vacante (el '17'), en principio para un mediocentro defensivo que suponga una 'ganga'. Más allá de eso, será difícil que haya otros movimientos, salvo inesperada gran venta, máxime si no se reconduce la trayectoria en la Conference League, donde se ha dejado de ganar en torno a 1,2 millones de euros tras haber ganado un solo encuentro, empatado otro y perdido dos de los cuatro ya saldados en la liguilla. No estará en los dos restantes Giovani Lo Celso, expulsado en la recta final ante los checos, al tiempo que sustitutos naturales como Isco Alarcón o Iker Losada no están inscritos ni podrán estarlo hasta febrero. Como se presupuesto llegar a 'semis', fichar para dos competiciones no parece rentable. Si hay milagro sin el rosarino...
