Lionel Scaloni, seleccionador absoluto de Argentina, ha decidido finalmente no convocar a Giovani Lo Celso, uno de sus fijos desde que accediera al cargo, incluido en la prelista de 33 jugadores que ofreció el pasado 3 de marzo. La noticia la adelanta el periodista Gastón Edul, con un millón de seguidores sólo en Twitter y que cubre la Albiceleste para TyC Sports, por lo que suele estar muy bien informado. De confirmarse, el rosarino sería uno de varios descartes que tiene que hacer el otrora carrilero derecho del Deportivo de La Coruña y el RCD Mallorca para afrontar las eliminatorias ante Uruguay y Brasil durante este parón de selecciones de marzo, primero de 2025. Un guiño para el Real Betis, que temía comprometer la recuperación de su dorsal 20 y que, si nada se tuerce, podrá tenerlo descansado y disponible para El Gran Derbi del próximo 30-M ante el Sevilla FC.
Lastimado durante el encuentro del pasado 16 de febrero ante la Real Sociedad, cuando todos interpretaron su cambio al descanso como un castigo de Manuel Pellegrini por haber desperdiciado un penalti, este domingo se cumpliría un mes en el dique seco. Salvo sorpresa, pues no se ha ejercitado todavía con el grupo desde entonces, no forzará en Leganés, mucho menos con este colchón de dos semanas por delante para afianzar su rehabilitación. Con una lesión de grado medio en el tercio medio del sóleo de su pierna derecha, su periodo de convalecencia se cifró en 4-6 semanas, por lo que molestó la citación inicial de Argentina. Y es que llueve sobre mojado en La Palmera, pues Lo Celso, que ha sufrido ya tres percances musculares este curso, cayó precisamente en octubre durante una concentración con su combinado nacional y, tras un mes K.O., sólo pudo actuar un rato ante el RC Celta antes de volver a cruzar el charco para acudir a la llamada de su seleccionador.
Podrá regresar, en principio, el ex del Tottenham ante el eterno rival hispalense, aunque el problema ahora para Manuel Pellegrini será hacerle hueco en el once, muy definido en el centro del campo. Tanto es así que el trío Antony-Isco-Jesús Rodríguez parece intocable. Los intentos del chileno de ubicar al de Rosario en la banda derecha como extremo a pierna cambiada, antes del aterrizaje del brasileño, fueron infructuosos, por lo que una solución sería, como ha ocurrido con Pablo Fornals, situarlo en el doble pivote. Por ahora, eso sí, el castellonense se ha hecho fuerte junto a Sergi Altimira o el ahora lesionado también Johnny Cardoso (no estaría de más otro gesto del seleccionador de Estados Unidos, Mauricio Pochettino, para no obligar al italo-estadounidense a marcharse este parón), por lo que lo de Gio aparece como la gran asignatura pendiente en lo que resta de curso.
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