Aunque existen evidentes lagunas en la planificación, especialmente en los puestos de central y mediocentro, de ahí que ya se trabaje pensando en enero, la dirección deportiva del Betis acabó muy satisfecha con el trabajo realizado durante el pasado mercado de verano. Fichajes como los de Diego Llorente, Natan, Lo Celso o Vitor Roque le dan la razón a Manu Fajardo. Pero además de no llegar ningún sustituto para Guido Rodríguez, uno de los aspectos que más se le critican, tampoco se firmó a ningún otro jugador de ataque cuando Ayoze, de forma inesperada, decidió aceptar la oferta del Villarreal y dejar plantados a los verdiblancos.
El internacional español, que ha protagonizando un arranque espectacular con el 'submarino', estaba llamado a ser una de las piedras angulares del proyecto. Pero el club de Heliópolis no pudo alcanzar sus pretensiones económicas y acabó dejándolo marchar por sólo cuatro millones de euros. La decisión en ese momento fue firme. Su reemplazo estaba ya en la plantilla, un 'fichaje' en toda regla al ser una de las caras nuevas con respecto a la pasada campaña: Juanmi Jiménez.
Tras una campaña lejos del Villamarín, en la que militó cedido en el Al-Riyadh saudí hasta enero y posteriormente en el Cádiz, el malagueño regresó con dos años más de contrato por delante y, aunque en un principio se barajó de nuevo su salida, fue él mismo quien apostó por seguir y tratar de ganarse de nuevo la confianza de Manuel Pellegrini, con quien protagonizó algún desencuentro en el pasado.
Una charla entre ambos en el 'stage' de Austria hizo que el 'Ingeniero' se convenciera para darle otra oportunidad, que de Coín pareció aprovechar durante la pretemporada. Incluso, fue titular en las dos primeras jornadas de LaLiga, ante Girona y Alavés, disputando también en la 22 minutos en la vuelta de la ronda previa de la Conference League ante el Kryvbas ucraniano. Pero, desde entonces, su presencia ha sido poco menos que testimonial.
En las tres últimas jornadas ligueras se ha quedado sin salir del banquillo. Y anteriormente, contó con minutos residuales ante Real Madrid, Getafe y Mallorca (20 en total), perdiéndose por unas molestias el duelo frente al Leganés. Sólo en Europa, en la derrota ante el Legia de Varsovia, volvió a partir en el once, pero como el resto de sus compañeros, no estuvo acertado.
Atrás queda su explosión goleadora en la 21/22, en la que firmó 20 tantos y fue una pieza clave. El que estaba llamado a ser el sustituto de Juanmi está lejos de lo esperado, echándose de menos los 11 goles anotados el pasado curso por el tinerfeño, que este curso suma ya seis con su nueva camiseta.